Los de abajo se levantan

La Liga comienza a normalizarse. Los grandes que estaban en apuros empiezan a levantar cabeza y a despegarse de la zona caliente. Mucho han tardado pero más vale tarde que nunca. Las victorias de Athletic (que sale del descenso), Espanyol y Betis les alejan de los puestos de decenso, que ya están cubiertos por los equipos de menor presupuesto. El dinero pone a cada cual en su sitio, y por eso el Alavés de Piterman, sempiterno farolillo rojo de este año, lleva dos victorias casi consecutivas que le hacen rozar la permanencia.

El empate del Cádiz ante el Racing deja a ambos equipos en una situación parecida, aunque cada vez son menos los que están en la pugna. Los amarillos están tres puntos por encima del descenso, y tienen una referencia clara por arriba. La lesión de Kovacevic y la crisis económica está mermando a una Real Sociedad que ya está metida de lleno en la pelea por no bajar. Mucho peor están Málaga y Mallorca. Si la cabra tira al monte, el equipo de Tapia tiraba desde hace varias semanas directamente hacia el pozo de la clasificación. El técnico de Baena tiene las horas contadas porque los boquerones no reaccionan y el tiempo se termina. Lo del Mallorca era lógico porque enfrente tenía al líder destacado, el Barcelona. Como el año pasado, los de Cúper no están haciendo los deberes a tiempo y sufrirán para quedarse en Primera.

Por arriba, pocas cosas cambian. La Liga consume citas sin que el Barcelona frene su racha, ya de trece triunfos seguidos -dieciocho en partidos oficiales-. De nada le sirve al Valencia encadenar nueve jornadas sin perder o al Real Madrid recuperar ciertas sensaciones de poderío, que no ocultan carencias importantes como equipo. Da igual, el líder amplía su renta sobre el segundo a diez puntos; más de tres jornadas de margen.

Los brasileños Robinho y Cicinho lograron ayer con sus goles la victoria del Real Madrid a domicilio sobre el Celta (1-2) y mantienen viva la llama de la esperanza blanca en una Liga claramente dominada por el Barcelona, imparable con 14 triunfos consecutivos. El Barca se paseó en Mallorca (0-3) y los tropiezos de sus inmediatos seguidores Valencia (2-2 contra el Zaragoza) y Osasuna (0-2 frente al Betis) le disparan a una considerable ventaja de doce puntos, mientras que el Real Madrid se coloca tercero a trece del líder. Una jornada más el Barcelona no echó de menos la ausencia de Etoo.

Por otra parte, el Osasuna es una sombra del que plantó cara al Barca en la primera vuelta, y perdió justamente con el Betis. La ausencia del argentino Riquelme fue ayer una losa demasiado pesada para el Villarreal, vapuleado por el Sevilla con goles del brasileño Luis Fabiano y el malí Kanouté (2-0). Los tres puntos catapultan al equipo andaluz a la quinta plaza con uno de ventaja sobre los amarillos.

Por último, destacar la reacción del Atlético gracias a la llegada de Murcia al banquillo y al estado de gracia goleador del argentino Maxi, para desgracia del Dépor.