Francia aconseja a Mittal que inicie conversaciones amistosas con Arcelor

El ministro francés de Finanzas, Thierry Breton, ha segurado hoy, tras reunirse con el presidente y consejero delegado de Mittal Steel, el multimillonario Lakshmi Mittal, que la compañía anglo-india "no ha presentado un plan industrial" en su Oferta Pública de Adqusición (OPA), por 18.600 millones de euros, por el número dos del acero mundial, Arcelor. Breton ha insistido en el argumento del Ejecutivo francés de que la operación genera demasiadas incertidumbres y ha pedido a Mittal que inicie conversaciones amistosas de compra con Arcelor, que ha calificado la oferta presentada de hostil.

Por su parte, el presidente del consorcio europeo, Guy Dollé, ha asegurado que su empresa está preparada para "resistir" la oferta hostil que le ha lanzado el grupo anglo-indio Mittal, una operación con la que, dicen, ya contaban desde hace tiempo y contra la que habían preparado un dispositivo desde la pasada primavera.

Dollé vaticina el comienzo de una batalla que prevé larga en el tiempo, "al menos de cuatro a seis meses", y que, según la empresa, ganarán porque "somos sólidos, somos corredores de maratón y nos habíamos preparado para este ataque". El presidente del grupo siderúrgico europeo cree que la oferta de su rival Mittal, número uno mundial del sector, es "mala para los accionistas y para todo lo que gravita en torno a la empresa: sus empleados, sus clientes y la comunidad en la que vivimos".

En ese sentido, ha advertido de que hay "riesgos enormes tanto para los accionistas como para los asalariados" porque las dos compañías "no hacen el mismo acero y no tienen la misma concepción de la empresa".

En cuanto a las condiciones económicas, Dollé estima que la oferta es "un poco ridícula" porque se basa en parte en pagar en acciones propias de Mittal, "cuya historia bursátil desde que cotiza es muy mediocre".

El consejo de administración de Arcelor, que ayer se reunió para estudiar la OPA de Mittal, la rechazó unánimemente, recomendó a los accionistas que no aportaran sus títulos y alertó de las "graves consecuencias" que las propuestas de la compañía anglo-india podrían tener para el grupo europeo, sus accionistas, sus empleados y sus clientes.

Preguntado sobre qué espera del Gobierno francés, Dollé señaló hoy que "no pide nada más que un apoyo moral" que es "importante" entre otras cosas para que los trabajadores "sean conscientes de que los políticos se interesan por ellos".