Al menos 15 muertos al hundir la nieve un centro de exposiciones en Polonia

Al menos 15 personas murieron, varias decenas resultaron heridas de gravedad y más de cien pueden estar atrapadas al desplomarse ayer el techo de un centro de exposiciones en la ciudad polaca de Katowice a causa de la acumulación de nieve. Se desconoce el número de personas que se encuentran sepultadas y calculan que se necesitarán al menos 12 horas para encontrar a todos los afectados. Las primeras versiones señalaban que unas 500 personas pudieron haber quedado atrapadas.

En el momento en que se produjo el accidente en la nave, donde se celebraba una exposición internacional de palomas mensajeras, podía haber unas 1.000 personas, según testigos oculares y 700, según la Policía. Por el momento no existe información sobre los extranjeros víctimas del siniestro, aunque se sabe que había ciudadanos de otros países.

Rescate

En las operaciones de rescate participan 70 equipos de bomberos y 250 agentes policiales, así como especialistas en el socorro de personas enterradas, así como grupos dedicados en rescate minero. Además, se cuenta con el apoyo de perros amaestrados.

Los expertos en construcciones de acero, como la nave destruida que tenía cien metros de ancho por ciento cincuenta de largo, aseguran que los elementos del techo, al hundirse, formaron una especie de castillo de naipes, lo cual pudo salvar a muchas personas. De hecho, la Policía mantiene contacto, con ayuda de teléfonos móviles, con varias personas que todavía no han sido rescatadas. Los equipos de auxilio temen que las heladas, con temperaturas de doce grados bajo cero, puedan ser mortales para las víctimas. De hecho, la ola de frío se ha cobrado ya la vida de al menos dos centenares de polacos.

La mayoría de ellas no podrán ser rescatadas sin contar con los equipos pesados, que tenían previsto llegar al lugar del siniestro hasta esta mañana.

El Gobierno ha constituido una comisión especial encargada de investigar el suceso y establecer sus causas, según anunció su portavoz, Konrad Ciesiolkiewicz. «Solamente quiero recordar ahora que hace dos semanas difundimos un comunicado en el que se recalcaba la necesidad de que se controlasen todos los tejados para eliminar el amontonamiento en ellos de nieve», dijo. El primer ministro, Kazimierz Marcinkiewicz, se trasladó anoche a Katowice.