huyeron tras estar involucrados en un accidente de tráfico

Los dos presuntos etarras detenidos ayer en Francia son Urtzi Gainza e Iñigo Ripoll

En el momento de su detención por la gendarmería francesa iban armados y con documentación falsa

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Los dos presuntos etarras detenidos ayer en el sur de Francia son Urtzi Gainza Salinas e Iñigo Ripoll Estarta, que se encontraban huidos de la justicia española, según fuentes de la lucha antiterrorista. La identidad de los dos etarras ha sido determinada tras el análisis de las huellas dactilares, ya que en el momento de su detención por la gendarmería francesa iban armados y con documentación falsa.

Urtzi Gainza fue procesado el 28 de junio del pasado año por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, junto a otros 29 presuntos miembros del aparato de infraestructura e información de ETA en Vizcaya, desarticulado entre octubre y noviembre de 2004 en una operación simultánea de la Policía y la Guardia Civil.

De los treinta procesados, siete se encontraban huidos, entre ellos Urtzi Gainza, por lo que el juez dictó contra ellos las correspondientes órdenes de busca y captura. Algunas fuentes relacionan a Gainza con una emboscada a la Ertzaintza en el Alto de Herrera (Alava), en septiembre de 2003, en la que resultaron heridos dos agentes y murió un presunto miembro de ETA.

Iñigo Ripoll, nacido en Bilbao en 1975, tiene una reclamación del juzgado número 2 de la Audiencia Nacional, con fecha 10 de julio de 2003, por un delito de pertenencia a banda armada. Ripoll fue también identificado como integrante de un comando que iba a cometer atentados en el verano de 2004 en Cataluña y Levante.

Las fuerzas de seguridad le vinculan con el comando Vizcaya y al parecer estaría huido de España desde 2002. En esa fecha se le relacionó con dos activistas -Hodei Galarraga y Egoitz Gurrutxaga- que murieron cuando manipulaban una bomba en un vehículo en el barrio bilbaíno de Basurto.

Gainza y Ripoll fueron detenidos ayer en el sur de Francia, perseguidos por los gendarmes después de que huyeran tras estar involucrados en un accidente de tráfico.

Los dos hombres, que viajaban en coche, colisionaron con un camión en la localidad de Saint-Paul Cap-de-Joux, en la carretera entre Castres y Lavaur, tras lo cual se apoderaron del vehículo, tras amenazar con un arma a su propietario, y se dieron a la fuga, aunque luego se salieron de la carretera nevada.

Los dos presuntos etarras detenidos ayer en el sur de Francia son Urtzi Gainza Salinas e Iñigo Ripoll Estarta, que se encontraban huidos de la justicia española, según fuentes de la lucha antiterrorista. La identidad de los dos etarras ha sido determinada tras el análisis de las huellas dactilares, ya que en el momento de su detención por la gendarmería francesa iban armados y con documentación falsa.

Urtzi Gainza fue procesado el 28 de junio del pasado año por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, junto a otros 29 presuntos miembros del aparato de infraestructura e información de ETA en Vizcaya, desarticulado entre octubre y noviembre de 2004 en una operación simultánea de la Policía y la Guardia Civil.

De los treinta procesados, siete se encontraban huidos, entre ellos Urtzi Gainza, por lo que el juez dictó contra ellos las correspondientes órdenes de busca y captura. Algunas fuentes relacionan a Gainza con una emboscada a la Ertzaintza en el Alto de Herrera (Alava), en septiembre de 2003, en la que resultaron heridos dos agentes y murió un presunto miembro de ETA.

Iñigo Ripoll, nacido en Bilbao en 1975, tiene una reclamación del juzgado número 2 de la Audiencia Nacional, con fecha 10 de julio de 2003, por un delito de pertenencia a banda armada. Ripoll fue también identificado como integrante de un comando que iba a cometer atentados en el verano de 2004 en Cataluña y Levante.

Las fuerzas de seguridad le vinculan con el comando Vizcaya y al parecer estaría huido de España desde 2002. En esa fecha se le relacionó con dos activistas -Hodei Galarraga y Egoitz Gurrutxaga- que murieron cuando manipulaban una bomba en un vehículo en el barrio bilbaíno de Basurto.

Gainza y Ripoll fueron detenidos ayer en el sur de Francia, perseguidos por los gendarmes después de que huyeran tras estar involucrados en un accidente de tráfico.

Los dos hombres, que viajaban en coche, colisionaron con un camión en la localidad de Saint-Paul Cap-de-Joux, en la carretera entre Castres y Lavaur, tras lo cual se apoderaron del vehículo, tras amenazar con un arma a su propietario, y se dieron a la fuga, aunque luego se salieron de la carretera nevada.