A base de pastillas
Actualizado: GuardarQué rabia! Cada vez que pienso que al Cádiz le pudo haber tocado el Deportivo de La Coruña o el Valencia en las semifinales de la Copa del Rey, me pongo mala. No puedo evitar seguir soñando, aunque sé que a partir de ahora sí que nos toca el sufrimiento definitivo. Sueño porque se tuvo cerca y porque, después de lo visto en el Bernabéu, todo era posible a un único partido en la final. En fin, habrá que resignarse, que en ese arte les puedo asegurar que soy una verdadera experta, y mirar hacia el futuro liguero con paciencia, mucha paciencia...a ver, esperen...un momento que...me tengo que tomar la pastillita porque empiezo a ponerme nerviosa. Paciencia tenemos que tener todos los aficionados al fútbol y al buen rollo. La semana pasada la mayoría aplaudían la propuesta de sanción a Clemente por sus manifestaciones racistas y resulta que ahora pasan por alto las declaraciones de Quique Sánchez Flores antes del choque copero frente al Depor. El hecho de que este caballero se haya dedicado a calentar el encuentro, fomentó lo que fomentó en Mestalla, donde encima un gilipollas tuvo puntería que es lo que se castiga casi siempre. Parece mentira que algunos lleven tanto tiempo en esto del fútbol porque no se enteran de cómo funciona. Si lo que el técnico che quería era que Megía Dávila les ayudase, se equivocó de estrategia, hasta el punto de que si el colegiado no hubiese salido tan cabreado al terreno de juego, a lo mejor, se le hubiese podido convencer para que no suspendiera la vuelta de cuartos. Sánchez Flores se ha equivocado, igual que lo hizo Clemente con su simpatía habitual, igual que Etoo con su no castigado escupitajo e igual que Lendoiro al pedir la eliminación del Valencia. Aunque se entiende que con el empate de David Villa nos ha entrado el miedo y los nervios, así que voy a por otra pastillita para relajarme.