Arrojan en una persecución 20 kilos de hachís e intentan atropellar a dos agentes

Como en una película policiaca, con todos sus ingredientes tradicionales, se desarrolló una intervención de la Guardia Civil en Vejer. Lo que en principio comenzó como un control rutinario más de carretera desembocó en una persecución, una incautación de droga y un intento grave de agresión a dos agentes de la autoridad.

El pasado martes por la tarde, la Guardia Civil estableció diversos puntos de verificación en el término municipal de Vejer y alrededores. Cerca de las siete de la tarde, una patrulla de paisano se percató de que un BMW, modelo 318 IS, con matrícula CA- 6981-BM, realizaba maniobras para eludir el control policial que había en la venta El Tesonero.

La patrulla que iba de paisano decidió seguir al vehículo sospechoso y la Benemérita estableció otro punto de verificación en La Barca de Vejer para detener el BMW. Pero cuando llegó el turismo a la altura de este núcleo poblacional, el copiloto abrió la puerta derecha del coche y arrojó un bulto a la cuneta, que contenía 20 kilos de hachís. El conductor, a su vez, aceleró y emprendió la huida.

Pero para zafarse del cerco policial, el turismo intentó atropellar a dos guardias civiles que obstaculizaban su paso. Según confirmaron fuentes de la Guardia Civil, los agentes resultaron heridos, pero con lesiones leves.

El vehículo sospechoso fue encontrado, ya abandonado, en la avenida Juan Carlos I de Vejer. Pero la Guardia Civil ya tenía identificados a los dos ocupantes del vehículo y decidieron peinar la zona para localizarlos. En las inmediaciones del centro de salud fue encontrado Juan Manuel L. C., de 29 años, quien resultó ser la persona que arrojó la droga.

Durante la persecución, la compañera sentimental del dueño del BMW denunció en el cuartel que el coche había sido robado. Pero la Guardia Civil confirmó que el propietario del turismo era la persona que estaba al volante del coche; por lo que Lidia N. S., de 20 años, fue detenida por realizar una denuncia falsa y ser cómplice en un delito contra la salud pública. Posteriormente fue localizado y detenido el dueño del coche, Diego V. A., de 29 años. Todos pasaron a disposición judicial.