Crecimiento cualitativo
Actualizado: GuardarAunque soy consciente de que me expongo a que algunos críticos interpreten mis palabras como simple obviedad e, incluso, de que las juzguen como desaprensivo menosprecio al equipo que ascendió de categoría, me permito expresar mi opinión de que, en este mes de enero, es cuando el conjunto amarillo ha demostrado ser un equipo de la División de Honor. Tras comprobar con atención, no sólo el juego desarrollado, sino también la actitud que los jugadores y los aficionados han adoptado dentro y fuera de los estadios a los que han acudido, he llegado a la conclusión de que la plantilla, gracias a las nuevas incorporaciones, ha crecido en fuerza física y en capacidad técnica. A lo largo de la temporada pasada e, incluso, durante la primera vuelta de la presente, todos estábamos de acuerdo en que las principales virtudes de este equipo eran la humildad, el sacrificio y el trabajo. Con estas armas fueron capaces de ascender a Primera y, posteriormente, de situarse fuera de los puestos de descenso; tras los partidos jugados en este primer mes del nuevo año, podemos afirmar que el equipo ha ganado en solidez, en fluidez y en equilibrio, tres cualidades que, a nuestro juicio, caracterizan a los conjuntos que militan en la máxima categoría. Pero, en mi opinión, la prueba más contundente de este crecimiento cualitativo nos la ofrece la serenidad que los profesionales mantienen tanto en las circunstancias favorables como en los trances adversos. Recordemos cómo el equipo no se descompuso ni se encerró en su área, por ejemplo, cuando Medina marcó el gol a Casillas, ni tampoco se volcó alocadamente cuando Armando encajó aquellos tres goles imparables. Ninguno de los componentes se acomplejó ante el resplandor mediático de los galácticos. La afición sí que era de Primera hace ya varias temporadas; por eso se mantuvo esperanzada durante aquellas largas temporadas en el pozo de la Segunda B y, por eso, conserva los pies en el suelo cuando su equipo logra esos meritorios triunfos como, por ejemplo, contra el Málaga o contra el Sevilla.