Nuevos informes municipales desacreditan la orden de derribo de la Casa de las Cadenas
Aparecen unos documentos fechados en 2001 que mantenían la protección integral de todo el inmueble Los textos califican de «impensable» la segregación de la finca, cuya demolición fue decretada en el verano de 2004
Actualizado:Dos nuevos informes municipales vuelven a crear la incertidumbre que siempre ha planeado sobre la orden de derribo parcial de la Casa de las Cadenas, la Casa de Cargadores a Indias del siglo XVII ubicada entre la Plaza del Polvorista y la avenida de la Bajamar. Como se recordará en verano de 2004, el alcalde decretaba la demolición de la parte trasera del inmueble (la que da a Bajamar) al considerar que había un «grave peligro de derrumbe» que podía ser un «riesgo para los ciudadanos».
Pues bien, el grupo Izquierda Unida denunció el caso a la delegación de Cultura ante la sospecha de que tras esta actuación existía un claro interés especulativo de la finca. IU apuntó que en el solar resultante ya había un ambicioso proyecto inmobiliario en marcha y que el Ayuntamiento se había 'saltado a la torera' el trámite administrativo a seguir y, el interés histórico artístico del edificio (a la postre catalogado como Bien de Interés Cultural).
A resultas de este caso, que, actualmente sigue su curso por vía judicial, LA VOZ ha tenido acceso a dos nuevos informes municipales que desautorizaban cualquier intervención en el edificio. Los documentos del año 2001 están rubricados por el arquitecto adjunto del servicio de planeamiento y gestión urbanística, Humberto Jiménez Ruíz y, por, el entonces teniente alcalde de Urbanismo, Pedro Alamillos. Además, estos documentos fueron sellados como prueba judicial en julio de 2003 por el Ayuntamiento ante en el Juzgado número 1 de lo contencioso y administrativo de Cádiz.
Los informes se elaboraron a petición de uno de los propietarios de la parte derribada que solicitó al servicio municipal información urbanística del inmueble. Su intención entonces era impugnar el cobro que el Ayuntamiento le había hecho por realizar unas obras en la finca.
Conjunto
En ambos escritos se recalca el interés del edificio «en su conjunto». «Siempre, desde su construcción, se ha tratado de una casa de Cargadores a Indias y, espacial y estructuralmente todos los recintos interiores se encontraban y se encuentran relacionados y conectados entre sí, sin presentar construcciones independientes, con respecto de una edificación principal». Esta consideración desmonta los argumentos que siempre se han mantenido de que el derribo se había acometido en la parte trasera del inmueble (Bajamar, 20), diferenciándola del conjunto histórico artístico. A este respecto, el informe reza lo siguiente: «Es impensable, a todos los efectos, el que pudiera pensarse en una segregación de alguna parte de la edificación que componía la casa de Don Juan de Vizarrón (Casa de las Cadenas)».
Por otro lado, en el informe urbanístico se confirma que sobre la Casa de las Cadenas el PGOU vigente (del año 92) da al inmueble un nivel de protección integral. En este sentido y, según la ordenanza de edificios protegidos, «las parcelas con algunos de los niveles de protección (como es el caso) no podrán ser objeto de segregaciones».
Pero además, hay que recordar que la delegación de Cultura abrió expediente sancionador al Ayuntamiento por no pedirles permiso antes de acometer el derribo. El actual concejal de Urbanismo aseguró en su momento que dicha autorización no era preceptiva. El informe vuelve a contradecir esta versión: «Al encontrarse declarado Conjunto Histórico Artístico Bien de Interés Cultural el casco histórico de El Puerto, cualquier actuación arquitectónica o urbanística que pretenda llevarse a efecto sobre el inmueble en cuestión, habrá de ser, preceptiva y previamente, aprobada por la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía.