Un jugador de apuesta segura
Actualizado: GuardarMuchos dicen que solamente entra en el juego cuando tiene la seguridad de que puede ganar, aunque él sostiene que no es un político profesional. Pero lo que nadie discute al socialdemócrata Aníbal Cavaco Silva es su personalidad introvertida pero determinada, que piensa con cuidado todo lo que dice y que ha marcado la vida política del país.
Fue el primero en lograr una mayoría absoluta en la historia portuguesa, el líder del Partido Socialdemócrata que más tiempo duró en el cargo, diez años -los mismos que fue primer ministro-, en el gobierno más extenso de toda la historia democrática del país y, junto con Mario Soares, el político que más cargos gubernamentales ha tenido.
Cavaco, de 66 años, nació en una familia humilde del sur, aunque a base de tenacidad estudió Economía en la universidad inglesa de York. Se define a sí mismo como un hombre de familia y de hecho en los tres meses de precampaña electoral en los que ha recorrido todo el país solamente pasó una noche fuera de casa. Sin embargo, nunca mezcla la vida política con la privada y familiar; su mujer, María, le acompaña en las campañas, pero siempre en un segundo plano, nunca interviene.
Poco amigo de la prensa
Habla con soltura de temas económicos, pero se siente incómodo ante cuestiones diferentes. No está a gusto con la prensa ni entre grandes multitudes, ya que aunque se esfuerza, la espontaneidad no es uno de sus fuertes, reconocen sus más próximos.
«No soy un hombre de retórica, es obvio, pero soy una persona comunicadora», afirma el político, al que no le gusta leer periódicos, aunque sí libros históricos.
Pero ese aspecto de hombre frío e imperturbable no quita para que todos le reconozcan su competencia y sus valores. Aunque gran parte del apoyo que recibe viene de la derecha, él se define como un socialdemócrata y asegura que no olvida sus orígenes humildes ni las cuestiones sociales.