¿Quién habló de derechos individuales?
Actualizado: GuardarQuienes con excesivos escrúpulos garantistas, pensaban que el respeto constitucional a los derechos individuales debería primar sobre la Ley de Partidos Políticos y la sentencia del Tribunal Supremo que ilegalizó a Batasuna deben estar ahora buscando un escondrijo donde ocultar su ingenuidad o su colaboracionismo. Porque el «acto» celebrado ayer en Baracaldo ni estuvo convocado por personas anónimas que a título individual ejercían su derecho de reunión ¯pues el día antes ya se había descubierto que los solicitantes habían sido dirigentes políticos de organizaciones ilegalizadas¯ ni asistieron a ella ciudadanos que no fueran representantes y simpatizantes de fuerzas políticas que están fuera de la ley porque extorsionan, promueven, justifican, exculpan o legitiman los atentados terroristas y cualquier tipo de violencia como método para la consecución de objetivos políticos.
Por si quedara alguna duda, el acto fue protagonizado y rentabilizado políticamente por Arnaldo Otegi. En él aseguró que Batasuna estará presente en la resolución del conflicto vasco y en la mesa de partidos; que la izquierda abertzale sabrá responder a las provocaciones; que España y Francia están emplazadas a respetar «la nación vasca». Y para que quedara bien claro quién organizaba el desafío a la legalidad, Otegi se hizo acompañar en el escenario de sus compañeros de Batasuna Pernando Barrena y Joseba Permach.
En esas circunstancias, el Gobierno vasco se limitó a que la Ertzaintza sobrevolara la zona en helicóptero y apostara algunas furgonetas en las inmediaciones sin ninguna orden de intervenir. Así pudo quedar meridianamente claro que entre los figurantes en el acto prohibido se encontraban conocidos miembros de EHAK el partido sucesor de Aukera Guztiak continuador de Batasuna y LAB, el sindicato próximo a Euskal Herritarrok. Obviamente no estaban allí para ejercer sus derechos ciudadanos sino dar al acto el carácter político que convenía a sus propósitos.