Prisión para el acusado de matar a la joven desaparecida en Baiona

Estrangulado y acuchillado. Así fue hallado el cadáver de Águeda González, una joven de 21 años, residente en una aldea de la localidad pontevedresa de Baiona, que desapareció el pasado día 11. Fue su presunto asesino, Francisco Javier Reyes Barreiro, quien indicó a la policía el paradero de la joven, después de que los agentes le detuvieran, este miércoles por la tarde.

Reyes Barreiro, albañil de 29 años, casado con dos hijos, telefoneó a Águeda a las 13.30 de aquel miércoles. Fue la última llamada que recibió el móvil de la víctima. La Policía procedió entonces a arrestar al propietario del teléfono de origen, que confesó el crimen. Su versión es que mantenía una relación sentimental con la víctima y que la mató en un momento de locura.

Sin embargo, la investigación no ha podido confirmar este extremo, mientras que el hermano de la fallecida negó esa relación, en declaraciones tras la concentración de repulsa que se celebró ayer tarde en Baiona por parte de todos los vecinos de la localidad. Sí es cierto que ambos se conocían desde pequeños y la hermana del presunto asesino era amiga de Águeda. El detenido facilitó a la Policía un croquis del lugar en el que había escondido el cadáver, lo que unas horas más tarde era confirmado con el hallazgo del cuerpo de la joven escondido bajo unas piedras en una pequeña gruta natural del parque forestal Chan da Lagoa.

Los investigadores siguen buscando el móvil del crimen, mientras al detenido se le decretó ayer por la tarde prisión preventiva, tras reiterar ante el juez la confesión realizada ayer a la policía. También ayer se practicaba la autopsia del cadáver en el hospital Nicolás Peña de Vigo, por orden del Juzgado de Guardia de Vigo. Las primeras conclusiones apuntan a que la víctima se defendió y aparentemente no sufrió violencia sexual.

Hoy se celebrará el funeral en el cementerio parroquial de Baredo a las 16.30 horas.