Regreso

NO puede ser azar que a la misma hora en que José Luis Moreno volvía a TVE-1 Antena 3 emitiera El regreso de la momia. Y si fue casualidad, habrá que reconocer que a veces el capricho es más sabio que la ciencia. Volvió Moreno con un espectáculo de colorín audazmente titulado Sábado noche, quizá porque, tal y como están las cosas, es mejor asegurar que la gente sepa a qué atenerse. Sobre el escenario, Josema Yuste, desenvuelto y hasta paternal, y Nani Gaitán, que ha ascendido a la pública desde las pasarelas de miss y los gallineros sórdidos de Crónicas marcianas.

Y después, otros atractivos de perfil poco reprochable: Anthony Blake, Isabel Pantoja y María Isabel, singular pareja esta última que nos enseña cuál es nuestro presente y cuál será nuestro destino. Vi poco más: alguna actuación musical no fácilmente reconocible, alguna retrospectiva en directo Lo mismo de antes, pero sin chicas en lencería. Dicen que José Luis Moreno está degustando en frío, como debe ser, el plato de la venganza: lo primero que hizo Caffarell al llegar al Ente fue echar a este señor, identificado con la telecaspa, pero ahora, enfrentada a la dura realidad de unas cuotas de pantalla calamitosas, TVE pide el auxilio del ventrílocuo.

Ocurre que en España no hay ningún otro productor con esa capacidad para empaquetar un show, envolver los ingredientes y desplegarlos después ante la cámara con el aire de quien anuncia la llegada del Mayor Espectáculo del Mundo. Eso ya es en sí mismo un mérito, incluso al margen de la calidad del espectáculo: la televisión, últimamente, es más una técnica que un arte, como casi todo. Y en TVE deben de haber pensado que, puestos a invertir en técnica, mejor hacerlo sobre apuestas seguras. Es lo mismo que pasa con el I+D, que esa misma noche le contaba Grisolía a Baltasar Magro, en De cerca: que el Gobierno se gasta casi todo en Defensa, es decir, lo que le reprochaban al PP. Al final, no nos engañemos, el país da de sí lo que da.