Bachelet puede convertirse hoy en la primera mujer presidenta de Chile
Los sondeos dan a la candidata socialista una mayoría con el 53% de los votos
Actualizado: GuardarEl desafío es múltiple. Si llega a la presidencia en los comicios de hoy en Chile, la socialista Michelle Bachelet, favorita para vencer al derechista Sebastián Piñera, será la primera mujer en gobernar su país y la primera que se coloca al timón de una democracia sudamericana por decisión de los votantes. Según la última encuesta, la candidata oficialista se impone a su rival con el 53% de las preferencias frente al 47% .
Pero ese reto, que en un país machista no es menor, no será el único. Esta médica de 54 años, divorciada y madre de tres hijos, tendrá, además, que demostrar que es capaz de avanzar hacia un reparto más equitativo de la riqueza. Ésta es la principal asignatura pendiente de la Coalición para la Democracia, integrada por socialistas y democristianos, que gobierna Chile desde el advenimiento de la democracia en 1990.
«Ella simboliza lo que no ha ocurrido en Chile», interpretó la directora de la consultora Mori, Marta Lagos. «Despierta la expectativa de desmantelar las desigualdades a partir de su condición de mujer, porque las mujeres representan el poder de los que no tienen poder», remarcó. Bachelet sabe de esta esperanza. «Un Chile más próspero y justo para todos está ahí, al alcance de la mano», vislumbra.
Es que en este país, la economía crece, los productos chilenos se hacen conocidos hasta en mercados remotos, la pobreza se redujo de manera drástica en tres lustros, y, sin embargo, la distribución de la riqueza es más desigual incluso que durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-90). Hasta tal punto ése es el gran desafío que Piñera, abanderado de la derechista Renovación Nacional, lo hizo eje de su campaña.
En este escenario, la llegada de una mujer al cargo, que se presenta como el rasgo más saliente de la coyuntura, parece la empresa menor. Bachelet fue ministra de Salud y de Defensa y está preparada para asumir el gobierno.
En América latina hubo dos presidentas elegidas por el pueblo y eso ocurrió en Centroamérica. Una fue la nicaragüense, Violeta Chamorro (1990-1997), y otra la panameña Mireya Moscoso (1999-2004). En Sudamérica, no hay esos antecedentes. La primera en llegar a la presidencia fue Isabel Martínez, en Argentina (1974-76). Martínez era la esposa y vicepresidenta de Juan Perón, y no estaba preparada para asumir la gestión al morir el fundador del partido. Su Gobierno terminó abruptamente con el golpe de Estado de 1976.
Otras mujeres que se sentaron en el sillón presidencial de la región fueron la boliviana Lidia Gueiler y la ecuatoriana Rosalía Arteaga, pero lo hicieron en medio de profundas crisis, por poco tiempo, y sin el respaldo del voto.
Salud y educación
En cambio, el viraje hacia un país donde la brecha entre ricos y pobres se reduzca es una apuesta mucho más costosa. Para ello, Bachelet tiene previsto invertir más en salud y acceso a la educación, una política que podría demorar en rendir frutos.
Al menos cuenta con un escenario favorable. En la primera ronda de las elecciones, celebradas el 11 de diciembre, una mayoría de votantes se inclinó por la Concertación, lo que permitirá al oficialismo contar por primera vez con una mayoría en ambas cámaras. La derecha replegó su influencia y no sólo porque obtuvo menos votos. A partir de marzo, cuando los nuevos congresistas tomen posesión de sus cargos, no habrá más senadores designados -afines a la derecha- por herencia de la Constitución de Pinochet ya derogada.
El nuevo panorama incluye una derecha más moderada. De hecho, Piñera se impuso en primera vuelta sobre su competidor interno, Joaquín Lavín, más conservador.