Los Oscar redimen al rebelde Robert Altman con el anual galardón de honor
El veterano director recibirá el próximo 5 de marzo la estatuílla honorífica en reconocimiento a una carrera en la que «ha reinventado el arte cinematográfico»
Actualizado:Uno de los directores más rebeldes de Hollywood, el realizador Robert Altman, recibirá este año el Oscar de honor a toda una carrera en el cine. La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas anunció el jueves su elección, un Oscar que le entregará al realizador octogenario el próximo 5 de marzo en la 78 edición de la ceremonia de los Oscar.
El premio le co-rresponde por «una carrera que ha reinventado continuamente el arte cinematográfico y que ha inspirado a otros realizadores y a la audiencia por igual», informó la Academia en un comunicado.
A pesar de su reconocida valía, este será el primer Oscar que recibe Altman, toda una institución en el campo del cine donde ha dirigido 86 filmes, ha producido 39 y ha escrito el guión en 37 de ellos. Algunas de sus cintas más notables y que aspiraron al Oscar al mejor director fueron M.A.S.H, Nashville, The Player, Short Cuts y Gosford Park. Altman ha sido nominado cinco veces al Oscar como director y dos más como productor -por Nashville y Gosford Park- a lo largo de su prolífica carrera, pero nunca pudo ganar ninguna estatuilla. En este sentido, entra en el club de los grandes olvidados por la institución como Alfred Hitchcock, Charles Chaplin, Greta Garbo, Deborah Kerr y Marilyn Monroe.
«Se trata de un maestro como realizador que bien se merece este honor», afirmó el actual presidente de la Academia, Sid Ganis. En su opinión, nadie como él a la hora de hablar de un innovador del medio. «Ha redefinido los géneros, ha inventado nuevos modos de utilizar el medio y ha revitalizado los antiguos», añadió.
Altman nació en Kansas City (Misuri) y comenzó su carrera como documentalista antes de su debut en el cine con The Delinquents en 1957. En televisión trabajó para series como Alfred Hitchcock Presents y Bonanza y en la adaptación de la popular serie M.A.S.H a la gran pantalla, con la que su carrera alzó el vuelo.
Además de sus logros cinematográficos Altman siempre ha sido un vocal defensor de la contracultura y de las libertades, uno de los artistas opositores al gobierno de George W. Bush que prometió abandonar Estados Unidos en caso de éste fuera reelegido a la Presidencia. Aunque Altman nunca dejó el país tras la victoria electoral de Bush, sus producciones cada vez se muestran más vinculadas a Europa que a Estados Unidos, donde se le hace más difícil encontrar financiación para sus proyectos.