Centenares de muertos en una estampida de peregrinos en La Meca
«Oí gritos, miré alrededor y vi a la gente saltando unos sobre otros, fue horrible, después sacaron cuerpos y los apilaron»
Actualizado: GuardarEl último día de peregrinación a La Meca para miles de musulmanes volvió a teñirse de negro. Al menos 345 personas murieron y otras 289 resultaron heridas en una avalancha humana durante el ritual de la lapidación a las afueras de las Ciudad Santa saudí. Ocurrió a media tarde de ayer en el acceso a un gran puente peatonal donde se ubican las columnas que simbolizan al demonio, a las que los fieles lanzan piedras como parte de la ceremonia. Otra estampida de similares características costó la vida a 244 personas en 2004 durante el mismo ritual.
Las autoridades saudíes creían tenerlo todo controlado pero de nuevo fallaron las previsiones. La masiva presencia de peregrinos -unos dos millones, según cifras oficiales- en la última de las ceremonias de la gran fiesta musulmana de la Hajj, que cada año se celebra en La Meca, ocasionó una nueva tragedia.
Tras la última avalancha de 2004, los oficiales encargados de los preparativos de la ceremonia decidieron construir barreras y colocar a cientos de vigilantes para controlar el paso de los peregrinos al puente de Jamarat, un gran estructura de unos ocho carriles de carretera, donde se ubican las tres columnas que simbolizan a Satán y sobre las que los fieles arrojan piedras.
De nada sirvió. Según el Ministerio del Interior saudí, el comportamiento de algunos fieles, que querían llegar al puente antes de que se pusiese el sol, como manda la tradición, y la caída de decenas de maletas del techo de varios autobuses de peregrinos que circulaban en medio de la multitud provocó un embotellamiento de personas en la entrada del puente.
Según un testigo citado por la televisión qatarí Al-Yasira, la catástrofe se inició cuando la Policía abrió paso en medio de la multitud a un alto cargo que pretendía participar en la ceremonia. Una versión que no compartía las autoridades saudíes.
«Saltaban encima»
«Oí gritos y miré a mi alrededor. Vi a la gente saltando, unos por encima de otros, era horroroso. La Policía vino y acordonó el área. Empezaron a sacar cuerpos y a apilarlos. No pude contarlos, eran muchos, decenas», relató el peregrino egipcio Suad Abú Hamada. Las imágenes de las televisiones mostraban filas de fallecidos tendidos en la calle y tapados con mantas blancas.
Unas 66 ambulancias se desplazaron al lugar del accidente, ubicado en Mina, a unos pocos kilómetros de La Meca , y los llevaron a siete centros hospitalarios la Ciudad Santa y de localidad de Arafat.
Según el Gobierno había unos 289 heridos, mientras que fuentes sanitarias hablaban de unos 600. La gran cantidad de fieles que había en Jamarat impidió evacuar a las víctimas en helicópteros. Las mismas fuentes aseguraron que una gran número de muertos y heridos provenían de países del sudeste asiático.
La avalancha se produjo el último día de la peregrinación musulmana en la que participaron durante varios días unos 2,5 millones de personas.
Por otra parte, el imán de la Gran Mezquita de la ciudad santa de La Meca , cuna del islam, instó ayer a los musulmanes, en el Día del Sacrificio, a resistir contra «los ajenos conceptos que Occidente trata de imponer con la excusa de la reforma». Abdel Rahman Sudeis condenó igualmente el lenguaje tendencioso que en su opinión usa Estados Unidos en los conflictos de Palestina e Irak.