La Junta de Andalucía obtiene el respaldo de Exteriores para frenar los sondeos del 'Odyssey' en Cádiz
Los arqueólogos británicos dicen poseer la autorización de su gobierno, aunque este no tenga competencias en esas aguas
Actualizado:Después de que la Consejería de Cultura anunciará que había dado la orden a las autoridades competentes en defensa y vigilancia costera para paralizar cualquier actividad arqueológica no autorizada, ante la posibilidad de que el buque Odyssey Marine (EE UU) sondease el fondo marino entre Sotogrande y La Línea en busca del navío inglés naufragado en 1694 HM Sussex, la consejera de Cultura, Rosa Torres, aseguró ayer en Cádiz que el Ministerio de Asuntos Exteriores, el de Cultura y la Junta de Andalucía están «coordinados para que se cumpla la legalidad».
En declaraciones a los periodistas en el Museo de Cádiz, Torres indicó que las tres instituciones que tienen algo que decir si se produjese alguna actividad no autorizada por parte del buque estadounidense Odyssey Marine, «no están cada uno por un lado, sino los tres coordinados y planteando la estrategia que deberemos llevar a cabo, que no es otra que el cumplimiento de la legalidad».
Aunque hay tres países que tienen que ver en el asunto -España, Reino Unido y Estados Unidos- con reglamentos diferentes, según Torres, quién «lleva las riendas» es la Ley de Patrimonio y el reglamento de actividades arqueológicas de la Comunidad autónoma andaluza, «que indica que cualquier actuación arqueológica en aguas jurisdiccionales de Andalucía, y en el espacio intermedio entre las autonómicas y las nacionales, debe tener previamente la autorización del organismo competente, que en este caso es la Consejería de Cultura».
Petición no cursada
La titular de Cultura reiteró que «no es que no se haya autorizado actividad alguna, es que no se ha recibido ninguna petición -por parte de la empresa Odyssey Marine Exploration-con datos para conocer si realmente se encuentra allí el buque Sussex». Una autorización que creen no necesitar los arqueólogos estadounidenses, que dicen haberla obtenido ya por parte del Gobierno inglés, aunque, según se asegura desde la Junta, este no tiene competencias en las aguas en cuestión.
Por último, Torres aseguró que por el momento no se ha extraído ningún resto, puesto que «las autoridades competentes siempre han actuado a tiempo».