Volvemos a las andadas

Han terminado las celebraciones navideñas y poco a poco vamos recuperando nuestro ritmo cotidiano. Desde finales de noviembre comenzaron los excesos en todo: en comida, en bebida, en salidas y en gastos. Según nos dice en estos días la prensa, a partir de Reyes, comienzan a proliferar la solicitud de prestamos bancarios rápidos para poder equilibrar lo desequilibrado.

Si hacemos balance comprobaremos que no es normal y justificamos lo injustificable. Aplaudimos el gasto por el gasto con la simple excusa del «...una vez al año...» o «...a saber el año que viene quien puede». Todos hemos caído en los mismos pecados y ahora estamos pagando las consecuencias pero, como dicen muchos, que nos quiten lo bailao.

El mes y pico de fiestas nos ha servido para ponernos a bien con nuestros compañeros de trabajo y amigos en pantagruélicas cenas. También nos hemos reunido con nuestros familiares a los que, por el ajetreo diario, a veces no vemos de nuevo en todo el año y los que viven fuera han vuelto a casa por Navidad, como decía el anuncio de la tele. Han sido unas fiestas entrañables en todos sus aspectos y, al menos a mí, siempre me satisfacen de una manera especial.

Ahora volvemos a la cruda realidad y, como cada año, comenzaremos con déficit. Al quitar los adornos navideños, el árbol y el belén, nuestras casas parecen mas vacías. Los problemas son los mismos aunque hayan estado aparcados durante un mes. Después del año nuevo, en el que todo fueron parabienes, felicitaciones y buenos propósitos han vuelto a aparecer, incluso agravados, los enfrentamientos municipales, la problemática del estatuto catalán, las rebajas y para colmo el comunicado del general Mena ¿Quien da mas?

Empieza el 2006 como terminó el 2005, con las mismas cuestiones pero mas enconadas y dentro de nada, para mas inri, comenzarán las estrategias electorales. ¿No se dan cuenta de que lo que los ciudadanos queremos es vivir en un clima mas tranquilo y relajado?. Lo que realmente deseamos es que se solucionen nuestros problemas, pero por lo que vemos diariamente, los políticos lo único que consiguen con sus actuaciones es aumentar el clima de crispación y descontento. Volvemos a las andadas aunque al menos parece que hay un cambio para mejor, el Cádiz ha vuelto a ganar en Carranza, algo es algo.