«Sufrir es nuestro sino; no hay que olvidar que somos el Cádiz»

Sin muchos alardes y con la misma seriedad que de costumbre, Víctor Espárrago analizaba un encuentro en el que se cumplió con el objetivo pese a un sufrimiento que se pudo haber ahorrado de sentenciar en la ida. No obstante, el charrúa destacó la «gran satisfacción de superar a un rival de tanta enjundia». «El objetivo era pasar y la verdad es que cerramos los caminos y pusimos en dificultades al Sevilla», señaló el preparador amarillo. Sobre el cambio en el once titular con respecto al alineado en la última jornada de Liga explicó que «sacamos a gente fresca que pudieran aguantar los noventa minutos bien. Todos corrieron, lucharon y consiguieron el objetivo», explicó.

Espárrago añadió que el Sevilla les «tuvo contra las cuerdas» en este partido, aunque recordó que en la ida «se pudo sentenciar y no pudo ser». Pero para Espárrago, sufrir estaba dentro del guión. «Es nuestro sino, somos el Cádiz».

Asimismo, apuntó las claras diferencias entre la calidad de un equipo y de otro, tal y como se pudo comprobar en el desarrollo de la segunda mitad del partido de vuelta. «Nosotros somos un equipo que está creciendo y que pelea contra los grandes, por lo que es una gran satisfacción superar a un equipo de tanta enjundia como el Sevilla».

Con la misma serenidad no quiso escoger un rival para el sorteo de los próximos cuartos de final. «Ahora toca disfrutar un poquito de esta clasificación y después el sorteo dirá. Lo que venga bienvenido sea», comentó saboreando aún el exitoso empate que abría las puertas de una nueva fase.

De la misma manera, no quiso dejar pasar la oportunidad sin antes felicitar el esfuerzo de sus jugadores. «Todos se merecen un 10», valoró. El técnico vio en la clasificación conseguida ayer en Sevilla una excusa para que su plantilla recupere la moral «de seguir confiando en el trabajo que estamos haciendo». Aunque, en este sentido, subrayó que «nunca la han perdido (la moral)».

Una de las veces que vio peligrar la clasificación fue en los minutos finales por lo que «pusimos a las torres (tres centrales y dos medio centros altos) para intentar cortar el juego aéreo que tanto daño nos hizo en la ida», argumentó el entrenador cadista poniendo fin a una rueda de prensa muy breve.