Un líder con recursos

EL Barcelona ha sacado de rueda a todos sus rivales. No es más que la consecuencia lógica de no haber cambiado de plato. Cuando un equipo sólo cede una derrota y encadena doce triunfos -quince si se suman todas las competiciones oficiales- las diferencias se agigantan: cuatro puntos frente al Osasuna, diez respecto al Valencia, once al Deportivo, doce al Villarreal y trece al Real Madrid.

No son distancias insalvables, pero basta ver al cuadro azulgrana para que cunda el desencanto entre cualquier aspirante. Es un líder con recursos, con diferentes versiones según las exigencias del partido. En Montjuic, con un fuerte aguacero y un Espanyol estajanovista en la presión, Rijkaard replanteó el centro del campo para alinear a Motta en lugar de Iniesta. Luego, llegó Deco, el que más prueba fortuna desde la frontal del área -tantos goles de desvíos responden a la lógica- y el gol de turno de Eto'o.

Así que el Barcelona ya es campeón de invierno, pero ha tenido que esperar a la penúltima jornada de la primera vuelta para decidir matemáticamente un título de carácter honorífico, pero que suele canjearse a la postre por el de campeón, y ese sí que vale.

La culpa la tiene el Osasuna -o, más bien , Antoñito-, que ayer dejó al fin de sumar todos los puntos en su estadio, ahora denominado Reyno de Navarra. Su empate frente al Racing (1-1) denota que el parón navideño no le ha beneficiado y, quizás, que puede comenzar su cuesta abajo, coincidiendo con una época que hace un año le fue nefasta. Sin embargo, los 39 puntos que suman los rojillos -al filo de la cifra que suele determinar la permanencia- son ya intocables y permiten asumir lo que viene sin presión alguna.

Toda la que le sobra al Real Madrid, que mejoró su juego en su difícil visita a El Madrigal. Su aplicación duró hasta el descanso, porque luego el Villarreal le acorraló, aunque el empate fue merecido. López Caro colocó a Helguera de 'pivote' y alineó a Woodgate; Ronaldo se lesionó -tendrá, en principio, para dos semanas- y, como Cassano no está aún para jugar y Baptista sigue negado, parece que Soldado seguirá teniendo oportunidades.

Nuevo orden

Por lo demás, el virus grastrointestinal no mermó en exceso al Atlético de Madrid y el Valencia frenó su racha triunfal en el Vicente Calderón (0-0), curiosamente un feudo más inaccesible para los que los visitan desde las alturas; el Sevilla acabó con su gafe frente al Málaga (3-1) y el Cádiz dejó los puestos de descenso gracias a un gol de penalti de 'Mortadelo' Mirosavljevic.

El fin de semana fue poco pródigo en goles (18), pero estuvo sobrado de 'cantadas' de los porteros, las de Molina, en el tanto de Urzaiz; Aranzubia, en el de Arizmendi; Kameni, ante el tiro de Deco, o Arnau, en el remate de Maresca. Además, apunta una curiosa tendencia: dos equipos vascos, el Alavés (12), que aún no ha ganado en casa, y el Athletic (15) ocupan las dos últimas plazas de descenso, con la Real Sociedad en fase decadente y, en Segunda, tres cuadros andaluces en los puestos de ascenso: Xerez (41), Recreativo (36) y Almería (31). En otras palabras, que el mapa futbolístico se inclina hacia el Sur.