La sequía, las heladas y las plagas han empeorado la salud del arbolado español
El Inventario de Daños Forestales constata que el 20 % de los árboles presenta una defoliación 20 por ciento superior a la del pasado año
Actualizado: GuardarLa sequía, junto a factores como heladas, plagas y otros, han deteriorado la salud de una quinta parte del arbolado español. El Inventario de Daños Forestales (IDF) de 2005, difundido hoy por el Ministerio de Medio Ambiente, reseña que el 78,5% de árboles estudiados presentan un aspecto saludable, mientras que el 19,5 por ciento tiene defoliaciones superiores al 25 por ciento y el resto son muertos o desaparecidos. Entre las causas detectadas están las de origen abiótico, las defoliaciones de primavera y la sequía.
En general, los resultados obtenidos detectan un empeoramiento en el estado del arbolado respecto al año anterior. Por especies, las frondosas son las que acusan más daños, con una disminución importante en el porcentaje de arbolado sano (76,7 por ciento de árboles en esta categoría), a la vez que aumenta el porcentaje de arbolado dañado (21,3 por ciento). Aunque menos, las coníferas también salen castigadas. El conjunto de los árboles dañados sube al 17,6%, los peores registros desde el inicio de los inventarios.
El estudio constata la muerte de muchos ejemplares debido al déficit hídrico continuado y las sequías puntuales. Las zonas más perjudicadas fueron, sobre todo, el Levante, Sureste peninsular y en áreas centrales de ambas mesetas. Las especies más vulnerables, los quercus (encinas, robles, etc.) entre las frondosas, y el pino carrasco dentro de las coníferas. A ello se sumaron las heladas en lugares tan dispares como Granada, Zamora y Huesca, que dañaron a especies variadas (pino silvestre, chopo, eucalipto, encinas).
En cambio, se aprecia una cierta disminución en los daños por el síndrome de la seca o decaimiento forestal, así como los atribuibles a hongos, a pesar de que se hayan generalizado las micosis foliares en los eucaliptares, principalmente en el Cantábrico oriental, y la cada vez más frecuente aparición de daños en Pino radiata.
Insectos
En 2005 se mantuvo el aumento de los insectos devoradores de hojas o defoliadores primaverales de frondosas ya detectado el año anterior en toda la Península. El Inventario destaca, además, la espectacularidad de las defoliaciones en rosáceas silvestres (endrinas, moras, zarzamoras...), provocadas por la explosión poblacional de la oruga de piñón, en Castilla y León, Álava, de La Rioja, Cantabria, Aragón, Cáceres, Granada y Cádiz.
El Inventario de Daños Forestales (IDF) se elabora sobre la Red Europea de Nivel I, fijada en 1987 para el seguimiento de daños en los bosques, en particular los relacionados con la contaminación atmosférica. Año a año se revisan los puntos de una red de 16 x 16 km., sistemática y aleatoria, tendida sobre la superficie forestal europea. Los puntos analizados revisados en España fueron 620 y se evaluaron casi 15.000 árboles.