Las ventas en los comercios del centro bajan pese a la paralización de las obras

Desde el pasado 17 de diciembre las obras de la segunda fase para la Revitalización del Centro Histórico se encuentran en tiempo muerto para favorecer las ventas de los locales que se están viendo afectados por las mismas desde que comenzaran hace ya algunos meses.

Muchos creían que la semipeatonalización de la zona del mercado de abastos les beneficiaría, pero lo cierto es que una gran mayoría de comerciantes ha notado el descenso de sus ventas con respecto a otras navidades.

Una vez se reanuden las obras, está previsto que finalicen para el mes de marzo. Poco después, en plena primavera, comenzará la tercera fase de esta revitalización con una inversión de casi un millón de euros.

En Kamil Kozan Pieles, ubicada en plena calle Vicario, han notado «un fuerte descenso en las ventas, casi una cuarta parte de lo que fue el año pasado». Según la encargada de este negocio «el problema reside en que la gente se piensa que aún está todo manga por hombro con las obras. Incluso hemos repartido octavillas para informar de que la calle es totalmente transitable para los peatones». La tarde del 31 tuvo que «cerrar porque esto estaba desierto, daba miedo».

Negocios que vivían de esos coches que aparcaban breves instantes en doble fila o en zona para minusválidos también han notado un descenso del tránsito de personas.

Es el caso de Fotosherry, dedicado al revelado de fotografía. «Muchos venían, aparcaban en la puerta un ratito, recogían sus fotos y se iban. Ahora no, muchos vienen quejándose de que han dejado el coche tan lejos que casi no les compensa venir» dice Eva, empleada de la tienda.

La venta de joyas también se ha resentido. Pepi es la encargada de la Joyería Anayas. «Con las obras hemos estado muy afectadas, ahora menos, pero comparado con otros años se nota mucho el descenso de las ventas».

Los tenderetes de ropa que hay en el mismo vial son un poco más positivos. «Es cierto que se nota menos gente pero puede ser porque han quitado el servicio de autobús que los dejaba aquí mismo, en cuanto a ventas la verdad es que son un poco inferiores a lo esperado para esta época».

En la esquina de Vicario con Sierpes está Electrónicas Selenio-Radio. Manolo, su dueño, también ha notado un descenso de clientela, «viene menos de la mitad con respecto al año pasado». Para él, «las cosas se pueden hacer mejor».

Todos esperan que las últimas compras de Reyes les salven las cuentas del recién estrenado año.