Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizActualidad
Artículos

Todo vicio

Actualizado:

Pero no era éste el tema de mi primera columna del año, sino la tremenda repulsión que sentí en Nochevieja hacia esa caja tonta, que nos escupió de casa a jóvenes y mayores en busca de consuelo. Un año más, me apunto a quemar la tele y sacar las cartas, la PSP o cualquier juego de mesa porque, desacostumbrada a recurrir a la tv como elemento de distracción, sentí mayor rechazo de lo habitual ante las trasnochadas galas, faltas de toda originalidad y llenas de tanto petardeo que huelen a rancio desde el primer frame.

Claro que mucho no cabía esperar después de ver las caras de siempre y las de turno en la despedida del año. Ramón García hace tantos años que no se come las uvas en casa que ya no le van a creer la excusa ni aunque le vean en TFT; y menos con esa suerte de capa que lució junto a Anne Igartiburu hasta que los aires de la capital entraron en cólera y dejaron a la vasca a merced de la fría intemperie y con unas transparencias impensables hasta hace dos años. A la chica tomatera le tocó seguir exprimiendo la alonsomanía hasta la última gota de champán y viajar hasta la tierra de la sidra para acompañar al particular calvo de la Navidad de Telecinco, Antonio Lobato, convertido en el verdadero gordo de la lotería por la lluvia de millones que habrá embolsado la cadena con su exitosa apuesta por la F1. Y de A3, ¿qué decir? Mejor callarse, aunque creo que más de uno no pudo evitar atragantarse ante el trío de la muerte: el portero, la modelo y el gordete del vecindario rozando el paroxismo en la Plaza del Sol. ¿Qué bochorno! Si lo cortés no quita lo valiente, y los fastos de Nochevieja no tienen por qué convertirse en la parada de los monstruos (y no me refiero a Juan Ignacio), sino reducirse a ser un respetable momento mediático con las caras más emblemáticas de cada cadena.... emblemáticas, no flemáticas. ¿Tan difícil es encontrar entre las bambalinas de los platós de la cadena más amarillista del momento a figuras con gancho y altura suficientes como para los últimos minutos del año? Si la respuesta es negativa y sólo cuenta el share, no me queda otra cosa que decir que con esta tv no hay quien viva.