Los principios de Rubiales, Lopetegui y el Real Madrid

Seguramente (ojalá que no), dentro de unos meses, quizás de unos días, tenga que escribir algo diferente a lo que voy a explicar a continuación porque alguno de los protagonistas cambiará su forma de actuar, pero creo que es de recibo destacar lo que ha ocurrido en todo el asunto de la destitución de Julen Lopetegui como seleccionador de España . Más que nada, por lo poco habitual que es. Y no me refiero a echar a tu entrenador a 24 horas de comenzar el Mundia l, que también, sino al cómo y al porqué. Y es que, tras conocerse ayer por la tarde su fichaje por el Real Madrid , la bomba ya había estallado en la concentración de la selección en Rusia. Faltaba por ver qué iba a pasar, y el desenlace ha sido dejar de contar con el gran culpable de toda esta situación: Lopetegui . ¿Decisión acertada? A mí modo de ver, sí. Mucho, además. Creo que en el mundo del fútbol ya es hora de que exista algún valor más que el del dinero. Que los principios se deben anteponer al «todo vale». Está claro que hay que ponerse en la situación de cada uno y que, seguramente, la opción de entrenar al Real Madrid será muy apetecible pero, cuando estamos hablado de la selección, no caben medias tintas. Por eso creo que Luis Rubiales ha estado soberbio. Firme. Contundente. Con España no se juega. Por mucho que seas el club más importante del mundo y pienses que estás por encima del bien y del mal.

Porque en año de Mundial, una vez que acaba LaLiga , todos cambiamos de equipo. Todos somos de la selección. Y lo que han hecho el Madrid y, sobre todo, Lopetegui no es de recibo. Es más, es una traición. Comprendo que el club blanco se vea en la obligación de buscar entrenador tras la espantada de Zidane , pero eso no lo tienen que pagar ni el resto de equipos ni, por supuesto, los millones de españoles que están deseando levantar un nuevo título de la Copa del Mundo . Las formas, los tiempos, eran inadmisibles, de ahí que la medida adoptada por Rubiales sea la correcta a pesar de que es evidente que es echar más gasolina al fuego a dos días de comenzar el Mundial. Pero ni mucho menos la Federación es la culpable, por mucho que ahora quieran vender eso desde la capital. El que se ha equivocado de cabo a rabo ha sido Lopetegui quien, no sólo tenía contrato en vigor, sino que lo había renovado hace escasos días. Y un seleccionador, por mucho que quieran decir ahora, no puede estar pendiente de la negociación con el Madrid en los días previos a un Mundial ni centrarse en los fichajes de su nuevo equipo durante la disputa del mismo. Esta vez, aunque no sea lo común, pierde el Madrid. Y su nuevo entrenador. Seguramente, Lopetegui habrá conseguido el contrato de su vida, pero ha perdido el respeto de casi todo un país. El club blanco ya lo perdió hace tiempo, así que le importará menos y seguirá actuando igual.