Hazte premium Hazte premium

Husillos y marmolillos

Sevilla está cambiando tanto que hasta se pierde el uso de estas palabras tradicionales de nuestras cosas

Antonio Burgos

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Vuelvo a insistir ante Emasesa y Lipasam, aunque me ponga pesado. ¿Se están limpiando los husillos pensando en las primeras lluvias gordas que han de venir, alejado, gracias a Dios, el peligro de gota fría? Lo digo porque todos los años pasa lo mismo. Como ... nadie se ha preocupado de mandar que limpien los husillos, taponados por hojas secas y basuras, en cuanto caen cuatro gotas las calles y las avenidas se anegan y se convierten en lagunas. El que avisa no es traidor, y no quiero serlo a lo que ha de venir. Pero ojalá que de una forma distinta a años anteriores: con los husillos limpios y desatrancados, por los que el agua pueda fluir sin atascos. Aunque he usado una palabra que ya en Sevilla es casi un arcaísmo. A los husillos, como recordaba el otro día, se les dice ahora imbornales. Queda como más técnico. Bueno, imbornales o husillos, como sea: pero que los limpien antes de que vengan las aguas.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación