OPINIÓN
Ea pues…, ya fueron los Grammy Latinos 2023
Me maravilla como revistas del corazón son capaces de dar una visión positiva de todos y cada uno de los atuendos, cuando algunos a mí me dejaron ojiplática y no en el buen sentido precisamente
Allá por principios de marzo escribí con gran ilusión que íbamos a celebrar los Grammy Latinos en España, más concretamente en Sevilla, que era la primera vez que se celebraban fuera de Estados Unidos y tal. Y como todo evento internacional no defraudó, tanto en ... buenas experiencias como en las malas, o tal vez malas sería exagerar, pero sí algo polémicas. En las buenas obviamente destacan los premios y nominados en sí. Para una servidora que estén de por medio Shakira, Juanes, Carlos Vives, Alejandro Sanz o Laura Pausini es todo un lujo, y los premios Excelencia Musical (de los seis: mis favoritas son Carmen Linares y Ana Torroja) me parecieron todo un acierto. Sin dejarnos en el tintero, por supuesto, el premio al álbum de música flamenca: Camino, de nuestra cañailla universal Niña Pastori, que lleva nuestro flamenco y nuestro «Cai» por el mundo entero ya sea, de mañana o por la «madrugá». Pero como ya he comentado antes todo evento público suele tener algo de polémica y esta vez la encontramos en el vídeo publicado en TikTok por Lucas González del dúo de Andy y Lucas en el que muestra su descontento hacia la organización del evento por no haberlos invitado a los premios: «Bajo mi punto de vista, un gesto feo hacia nosotros» manifestaba. Después dos décadas en el mundo de la música yo también pienso que es un gesto feo, teniendo en cuenta que se invitaron a personas que no pertenecían directamente al gremio. Algo que es del todo lícito, pero que también los podían haber invitados a ellos digo yo, aunque tampoco sé cómo va el criterio que tomó la organización para invitar a unos artistas sí y a otros no, si depende de la discográfica, el tenerla o no…, si han sacado la canción en el mes indicado o si son los más vistos en las redes sociales, pero que no fueron Andy y Lucas, no fueron. Otra polémica o anécdota que se cuece por ahí es que la influencer María Pombo posó en la alfombra roja cuando, supuestamente, no debía hacerlo, pero como buena influencer allí se quedó y consiguió su foto. Y con la alfombra roja continúo y no puedo dejar pasar la oportunidad de dar mi opinión (qué raro ¿no?) sobre algunos de los modelos que pasaron por ella. Me maravilla como revistas del corazón son capaces de dar una visión positiva de todos y cada uno de los atuendos, cuando algunos a mí me dejaron ojiplática y no en el buen sentido precisamente. Siempre se ha dicho que vestir a un hombre es más sencillo que a una mujer (sí ya sé que es una frase un poco anticuada, pero aún se oye por ahí), aunque ya cada vez menos, porque ellos también quieren destacar, y sí que destacaron algunos, sobre todo con trajes gigantescos como el gris que lucía Quevedo, o pantalones grandes como el de Manuel Carrasco, Yotuel o Sebastián Yatrá, y aquellos más alejados del canon tradicional como Camilo o Dawer y Damper, que a mí no me terminaban de convencer, pero yo es que en el fondo soy una clásica en lo que a moda masculina se refiere, así me decanto más por Álvaro Mel, Bizzarap, Carlos Baute, Luis Fonsi, incluso el de brilli brilli de Omar Montes. De ellas no me gustaron nada Nathy Peluso, no por revelador si no porque no parecía ser de su talla, y por mucho que lo quieran alabar, el de Victoria Federica tampoco estuvo acertado, su vestido me recordaba al de una graduación de los 90, el guante ni fu ni fa y el maquillaje la hacía mayor. Y mis favoritos el de Eva González y diez más, los cuales no puedo nombrar porque me quedo ya sin columna…
