Hitos marinos
La presencia de España, o la península ibérica en su conjunto, ha estado presente en la mayoría de las grandes hazañas y eventos marítimos, desde la navegación por el Mediterráneo comercial, hasta el descubrimiento de América
El martes de la semana pasada fue el quinientos aniversario de la primera vuelta al mundo de la afama expedición Magallanes-Elcano, por lo tanto el mundo del mar y las máximas autoridades rindieron homenaje a una de las mayores hazañas náuticas de la historia, ... en Sanlúcar de Barrameda (y en otras partes del mundo), ciudad de la que saliera dicha expedición en agosto de 1519, contando con doscientos treinta y nueve hombres, y cinco naos, comandados por Fernando de Magallanes, y de los cuales tan solo volvieron dieciocho hombres y una nao, Victoria, capitaneada por Juan Sebastián Elcano en septiembre de 1522. El homenaje contó con la presencia del rey Felipe VI que presidió los actos a bordo del buque escuela de la Armada española Juan Sebastián Elcano nombrado así por el artífice de dicha gesta. Numerosos barcos tanto militares como civiles se unieron a la parada militar, pero la verdad es que no es mi intención describir dicho evento, puesto que los distintos periódicos ya se hicieron eco del mismo. Tan solo quiero hacer constatar que la presencia de España, o la península ibérica en su conjunto, ha estado presente en la mayoría de las grandes hazañas y eventos marítimos, desde la navegación por el Mediterráneo comercial, hasta el descubrimiento de América. Sí, ya sé que los puristas dicen que España, o en su caso la corona de Castilla y Aragón, no «descubrieron» nada porque ya había civilizaciones procedentes de los antiguos continentes euroasiáticos, y que los vikingos se pasaron por allí siglos antes, quiénes en mi opinión, seguro que llevaban algún esclavo ibérico entre sus filas como parte de la tripulación, pero sí situaron el «nuevo» continente frente a los ojos del mundo conocido. Fue el primer paso a una globalización primitiva, donde se abrirían nuevas rutas al comercio y a la ciencia, y se desarrollarían nuevas tecnologías, empezando por el reacondicionamiento de los barcos para surcar grandes masas de agua. Tal vez esté mostrando una visión simplista y romántica de este hecho histórico, ya que después vino toda la parte oscura de la esclavitud, el colonialismo, las guerras entre potencias, etc. Pero es que quiero hacer hincapié en lo que supuso para la Europa medieval este cambio de mentalidad tan brutal, el mundo ya no se acababa en Finisterre, como pudo demostrar Juan Sebastián Elcano décadas más tarde. Ningún barco caería en las fauces de las bestias del abismo. Siguiendo con los hitos marítimos españoles (tal vez uno menos conocido), nos encontramos con una nueva «primera circunnavegación», ya en el año 1866, en este caso la de la fragata blindada Numancia, primer buque acorazado en dar la vuelta al mundo. Dicha fragata participó en todos los conflictos del último tercio del siglo XIX, y que también, a finales de 1870, trajo a España al rey Amadeo I de Saboya. Para conocer más detalles de esta fragata os sugiero que visitéis el Panteón de los Marinos Ilustres en San Fernando. Sergio, el guía, os hará pasar un rato maravilloso contando historias y anécdotas de nuestros marinos a lo largo de la historia. Gracias a él tuve conocimiento de la existencia de la Numancia y recuerdo que pensé: «¡Toma, ya! otra hazaña nuestra». La verdad que merece la pena la visita y el recorrido se os hará supercorto, y, aprovechando la mañana, de paso os acercáis al museo naval para completar el recorrido de conocimiento histórico-naval. Y ya si os queréis sacar el máster en la materia, no os podéis perder la visita al Observatorio de la Marina.