OPINIÓN
El día de la purga
«Una noche donde cualquiera pudiera delinquir o matar a todo el mundo sin temor a la represalia del día siguiente»
Hace bastantes años cuando estábamos redactando entre todos los autores las bases del primer reglamento del concurso de agrupaciones, hubo quien dijo que éste solo debería contener un solo punto; libertad. Eso a muchos y en esos momentos, nos parecía que era una gran idea. ... Ser propietarios de la libertad absoluta durante 30 minutos sobre el escenario de las tablas lo considerábamos como una revolución llena de fuerza, rebeldía y juventud. El tiempo y las variantes acaecidas están demostrando que hubiese sido un gran desastre.
No se si se acordaran de la película 'La Purga', donde se proponía doce horas de plena libertad en la que se permitía todo, incluso asesinar. Una noche donde cualquiera pudiera delinquir o matar a todo el mundo sin temor a la represalia del día siguiente. Imaginaros que hubiese pasado si aquel día hubiéramos aprobado esa locura de un reglamento con un solo punto, libertad.
Adivinar que pasaría si hiciéramos una purga carnavalesca, que durante la media hora disponible de actuación cada cual pudiera hacer lo que le viniese en gana.
Si en solo tres días que llevamos de concurso, tres sesiones, ya se han oído en los repertorios actuales insultos, descalificaciones personales, palabras soeces, lenguaje ordinario, chistes chabacanos y groseros… si hubiese una purga para la libre actuación saldrían a flote esa variante de autores que confunde la libertad, la originalidad y el doble sentido con la falta de respeto hacia nuestra tradición.
Una palabra mal sonante o grosera puede tener cabida en un repertorio pero no para utilizarlo de letanía porque le parezca gracioso y original. En tres día he visto saltos triples mortales en agrupaciones cuyos autores creen que la modernidad e innovación es destrozar lo bueno de nuestra fiesta. Si se hiciese una Purga de esas los creadores que asimismo se llaman transgresores, harían destrozos de tal calibre que no habría manera alguna de remediarlo. Confundir la valentía en las letras con un lenguaje lleno de ordinarieces y mal hablado es típico en autores de valentía sospechosa que quieren mandar su mensaje forzado de modernista y desobediente.
Una purga no pero yo les daba a alguno un purgante que les sacara tanta paranoia mental.