Cuento de Navidad

...que no le ahogue la pena, mal disimulada, ante una mesa demasiado grande y demasiado vacía. Mientras usted lo recuerde, ocurrirá, aunque no esté pasando

Yolanda Vallejo

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La última noche, cuando Ebenezer Scrooge ya pensaba que lo había visto todo, vinieron a visitarlo sus peores pesadillas. Su corazón duro y sus heladas intenciones no se habían conmovido con el calor de las Navidades pasadas; es más, la visión del pasado solo ... había servido para reafirmar su condición de sieso y de malaje . Uff -debió pensar- otra vez la comida de empresa, otra vez la cena con mi cuñado, otra vez los niños con los villancicos, y otra vez el rollazo de descambiar los regalos. Tampoco las navidades presentes, y todo eso de que “volveremos”, y “saldremos de esta” y de “que le den al 2020”, le había ablandado un poquito la coraza; al fin y al cabo, se había ganado por méritos propios, y durante años, el título de “aguafiestas” del año. Ya lo sabe, el señor Scrooge odiaba la Navidad, su almíbar y su exceso, su brillo y su calor. Pero la última noche, cuando Ebenezer Scrooge ya pensaba que lo había visto todo, un monstruo distinto a todos vino a visitarlo. Lo reconoció inmediatamente, “Fantasma del futuro –le gritó- te tengo más miedo a ti que a cualquiera de los espectros que he visto”.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación