OPINIÓN
La tarea pendiente
Mucho tiene que cambiar la política andaluza para que la Junta actualice sus indignantes retrasos en Cádiz
Por más hojas que pasemos en el calendario, hay cosas que no cambian y habrá que ver que el histórico vuelco político en la Junta de Andalucía del pasado domingo –aún por confirmar– sea capaz de cambiarlas. El proyecto de la Ciudad de la Justicia ... de Cádiz es uno de los mayores despropósitos de cuantos planes ha presentado la administración autonómica en los últimos años en la ciudad. Igualado, eso sí, con la Escuela de Náutica, el tranvía, la residencia Tiempo Libre y aquel nuevo hospital, aquel que se presentó en los terrenos de la antigua factoría aeronáutica, que se iba a construir con las plusvalías de pisos en la Avenida, donde se encuentra el actual Puerta del Mar.
Por tomar uno de tantos pufos de la Junta en Cádiz, resulta ilustrativo recordar ese proyecto presentado hace una década por el gobierno andaluz, el que pretendía unificar todos los juzgados de la capital actualmente se encuentran dispersos entre la Audiencia Provincial –Cuesta de las Calesas–, los de San José y los del estadio Carranza, entre otros. El solar elegido para ello era el ubicado entre las calles Brunete y Tolosa Latour, que llevaba años abandonado. Aquello debía servir para dinamizar esa zona de San Severiano junto al nuevo pabellón Portillo, otro de los grandes despropósitos urbanísticos de la ciudad, esta vez por parte del Ayuntamiento –del Partido Popular primero y de Podemos-Ganemos en la actualidad–. Ni la Ciudad de la Justicia ni el pabellón Portillo van a convertirse en nada a medio plazo y los vecinos de la zona conviven cada día con dos enormes solares abandonados que simbolizan a la perfección la realidad de Cádiz hoy en día.
Ahora, el candidato popular a la Alcaldía de Cádiz y su equipo aseguran que reclamarán estos proyectos al nuevo Gobierno de la Junta. Bien está que lo anoten en su agenda como prioridades ahora que los consejeros pueden ser compañeros de partido. Sería ideal, casi utópico, que otras formaciones tan distintas que ahora parecen recuperar la radicalidad y el sectarismo se pusieran de acuerdo en reclamar lo que está pendiente. Mucho tienen que cambiar las cosas para que se despeje el horizonte de tantos asuntos que debieran estar por encima de las siglas.
Ojalá el PP conserve la coherencia de estas peticiones y ojalá el resto de partidos pongan los intereses de Cádiz por delante del electoralismo.
