LAVOZDIGITAL - EL APUNTE
El revanchismo como estrategia
La denuncia por injurias que los tribunales han aceptado contra David Navarro sólo es el síntoma de las relaciones viciadas en el Ayuntamiento
El relevo político en la Alcaldía de Cádiz se fraguó con malas artes, con un revanchismo político ciego, que arrinconaba los intereses de los gaditanos y sólo trataba de buscar el derrumbe del Partido Popular y Teófila Martínez a cualquier precio. La complicidad del PSOE permitió que la operación se realizase pero los métodos del resentimiento y la exageración tendrían consecuencias negativas. Cualquiera podría preverlo. De hecho, ese enfrentamiento entre populares y Podemos ha llegado ya a la Justicia. El portavoz del grupo municipal del PP, Ignacio Romaní, anunciaba ayer una querella criminal por un presunto delito de injurias y calumnias contra el concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Cádiz, David Navarro. Es el nuevo hombre fuerte de la administración local, el experto en números, el relevo de José Blas Fernández, el cerebro en la sombra. Sin embargo, se le calienta la boca como al resto de sus compañeros de gobierno municipal. Al poco tiempo de tomar posesión, en un alarde justiciero, aseguró que el equipo de Teófila Martínez había gastado en los seis primeros meses del año 2011 la friolera de 4,2 millones de euros en publicidad institucional (vulgo: propaganda) en varios medios de comunicación. Desde el PP siempre se dijo que esa información era falsa y se exigió una rectificación que no ha llegado. «Va a tener que decir la verdad en el juzgado», defiende el PP que ha logrado ya que la denuncia sea admitida a trámite. Pero, asista o no la razón a los populares al recurrir a los tribunales para aclarar esta disputa, el problema es de fondo. El rencor de los nuevos concejales no mengua. Su estrategia única es tirar por tierra, desprestigiar, todo lo hecho antes. Para esa tarea, cuentan con el apoyo implícito del PSOE. Esa es la situación. Ese es el germen del conflicto. Y no va a desaparecer en mucho tiempo.