La Voz
La política municipal de Podemos queda en evidencia
Los resultados que arrojaron las urnas el domingo en Cádiz son sintomáticos de la paralización de la capital
Hace seis meses, justo el día después de las elecciones generales del 20 de diciembre, el alcalde de Cádiz aprovechó los casi 21.000 votos que obtuvo Podemos en Cádiz capital para ajustar cuentas. Cuentas que sólo él y los suyos creían que debían ser ajustadas, pues todo lo analizan desde el prisma del rencor y la afrenta. Al primero al que ‘disparó’ José María González fue al PSOE. Al partido que le regaló la alcaldía le lanzó varios mensajes, uno de ellos fue el reproche a lo que él denomina «zancadilla permanente», obviando que sin el complejo de inferioridad de los socialistas gaditanos –cuyo único fin era sacar a Teófila Martínez de la Alcaldía– él jamás hubiese colgado en ese despacho su cuadro de Fermín Salvochea. Y aprovechó también la ocasión para reprochar a la prensa local lo que él entiende como una campaña de desprestigio en su contra. Nunca se ha parado a analizar si no es él mismo y los integrantes de su equipo de Gobierno los que se ponen en evidencia con sus acciones y su discurso. Siempre fue más fácil matar al mensajero.
Consideraba, pues, el alcalde de Cádiz hace seis meses que su forma de hacer política estaba siendo todo un acierto. Tanto se lo creyó que a lo largo de estos últimos meses incluso ha hablado abiertamente de tomar el poder del gobierno central.Arrebatar la segunda ‘plaza’ al PSOE no era suficiente. Estaban convencidos de que era posible ser la fuerza más votada en las elecciones del pasado domingo.
Sin embargo, la tozudez de los votos han vuelto a bajarle los pies al suelo. La suma de votos con IU –en Cádiz Ganemos– no le ha dado los resultados esperados. Un análisis frío y real de la situación sólo puede concluir que los gaditanos empiezan a desconfiar de su gestión.Sin embargo, sigue instalado en el mismo discurso. No se mueve un ápice, aunque esta vez a la prensa la ha dejado al margen.
Y mientras tanto, mientras José María González juega a ser político nacional, la ciudad que el PSOE puso en sus manos sigue dando pasos para atrás.Sigue sin presupuesto, sin ningún proyecto de futuro. Y así nos quedan otros tres años.