LAVOZDECADIZ - EL APUNTE
La oportunidad nos ha cogido durmiendo
Es descorazonador que la patronal alerte de las carencias en materia de formación de nuestra industri cuando Cádiz afronta el mayor reto de los últimos años
La expresión de que la ocasión la pintan calva viene, perdón por el juego de palabras, al pelo para lo que ha sucedido con la industria naval en la Bahía. Esta frase hecha proviene de la mitología romana: la oportunidad tenía una larga cabellera pero era calva por detrás porque, una vez que pasaba, no se podía agarrar de ningún lado. La Bahía de Cádiz se encuentra ante un reto tremendo con la fabricación de cuatro petroleros después de que su industria naval civil haya estado detenida, por imperativo legal, durante 20 años. Y desde que se conoció el volumen de obra, el sector empresarial no ha cejado de repetir una verdad incómoda: falta mano de obra especializada. No vale la excusa de que la oportunidad ha llegado por sorpresa: la Bahía llevaba dos décadas esperando que regresara el maná de la construcción naval. La formación profesional del sistema educativo tiene un sinfín de divisiones, pero ninguna se adapta al 100% a las necesidades del sector naval.
Estas carencias quedaron de manifiesto en el Laboratorio de Ideas que celebró LAVOZ dentro del ciclo Cádiz es futuro, en el que participaron representantes del sector industrial de la provincia, así como especialistas en el sector. En el mismo encuentro, los especialistas lamentaron algo que siempre se ha señalado como uno de los grandes déficits a la hora de fomentar la llegada de industrias: la excesiva burocratización a la que deben hacer frente.
Lo triste es que el caso de la falta de formación en los astilleros no es un caso aislado. El sector de la hostelería, el gran pilar económico de la provincia, alerta precisamente de la poca capacitación de las nuevas generaciones para afrontar el trabajo. Y mientras la Junta, con todos los problemas de la Escuela de Hostelería, ha mirado para otro lado, pensando que el problema no iba con ella.
La ocasión la pinta calva y, con esta forma de actuar, así nos luce el pelo.
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