El Apunte

Un nuevo panorama político

La fragmentación ha llegado para quedarse y los fantasmas del extremismo pierden fuerza

La convocatoria electoral de ayer, la tercera en seis meses para los andaluces, deja una extenuante catarata de datos. Habrá tiempo para analizarlos y, sobre todo, para dejar que tomen forma de gestión política, de discurso y proyectos durante los próximos cuatro años. Pero es ... imprescindible sacar algunas conclusiones para empezar a trabajar con ellas, para comenzar la observación y la exigencia a las que están obligados los ciudadanos y los medios de comunicación. La principal es que la fragmentación ha llegado para quedarse. Grupos como La Línea 100x100 y Ciudadanos entrarán en Diputación para confirmar que cada vez son más las opciones políticas en las que se apoyan los votantes. En algunos ayuntamientos como el de Chiclana habrá siete portavoces de otras tantas formaciones diferentes. Habrá que aprender a convivir con esta realidad, apoyada de forma sostenida por el electorado, para convertir la cultura del pacto en asignatura obligatoria. Ya sucede, hace décadas, en otros países. Las mayorías absolutas son cada vez más infrecuentes y la población espera de sus representantes que negocien, que se entiendan y se hagan contrapesos.

En la capital gaditana, y en la provincia, llama la atención la notable caída del PP. El deterioro de su imagen estatal lastra el voto local. Sin embargo, el presunto impulso socialista en las recientes Elecciones Generales no ha dado a los aspirantes locales del PSOE toda la energía previsible. En Cádiz, como en otras localidades, se dan situaciones como que los socialistas ganan con claridad en las Europeas y se pegan un buen batacazo en las locales. Los candidatos tienen peso. Lo demuestran las claras victorias de Kichi en Cádiz, de Macías en Medina Sidonia y José Ortiz en Vejer, a pesar de las convulsas situaciones que viven sus siglas o de los enfrentamientos con las direcciones provinciales o estatales. Por no hablar del aplastante triunfo de Juan Franco en La Línea (21 de 25 concejales) pese a la compleja situación social que ha vivido la localidad, especialmente, en estos cuatro años. Vale más el nombre y la inercia del gobierno local que cualquier otro elemento.

Como última consideración apresurada, el fantasma de los extremismos asusta mucho menos de lo que parecía. Las candidaturas de Vox apenas han encontrado apoyos ni en las grandes ciudades ni en las localidades en conflicto migratorio donde incluso se les daba como ganadoras.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate

Ver comentarios