Dos años educando en una pandemia

Los chicos son los que más esfuerzo han tenido que hacer, porque en pleno crecimiento, cuando más vitalista se es, han tenido que canalizar toda su energía, primero en un confinamiento, después en las estrictas rutinas cotidianas de los centros

Nico Montero

Esta funcionalidad es sólo para registrados

En estos días se ha cumplido el segundo aniversario del inaudito y extraordinario confinamiento que tuvimos que asumir para plantar cara a una amenaza, que aún soportamos con resignación y no hemos vencido, la cansina pandemia. Estos dos años de vicisitudes pueden ser analizados desde ... variadas perspectivas, a mí me tocó vivirlo como director de un Instituto, el ‘Telegrafía’, que de la noche a la mañana cerró sus puertas y se adentró en un terreno incierto y desconocido, en el que había que reinventarse para no perder la conexión con el alumnado y sus familias y ser un sostén de ramificación social en tiempos de aislamiento. Las instrucciones no llegaban, el vademécum del profesorado no contemplaba semejante coyuntura, y había que tomar decisiones, con creatividad, sentido común e imaginación.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación