Respeto para el coro
Pónganse en el lugar de los coros y sus coristas. Un respeto a ellos durante el concurso, son el origen de nuestras coplas
![Nandi Migueles: Respeto para el coro](https://s3.abcstatics.com/media/opinion/2022/05/17/v/coro-kOl--1248x698@abc.jpeg)
A los coros en el concurso no nos regalan nada. Por bueno que sea el repertorio interpretado, el respetable del teatro nos consideran desgraciadamente agrupaciones de segundo orden. El aficionado que asiste al Falla, quitando los días de preselección donde acuden parte de nuestras familias, ... es un público comparsista. Abren la boca y se activa automáticamente un resorte en su asiento para que se pongan en pie.
A las coros se les tacha de aburridos, que los tangos suenan todos igual, que no sabemos cantar, que en nuestras orquestas no hay prodigiosos ejecutantes de instrumentos, ni grandes solistas, que no tenemos gracia y que somos el momento justo para comerse el bocadillo. La realidad es otra bien distinta, créanme.
De las 60 comparsas inscritas en un concurso normal, 50 tienen menos arte carnavalero que la gente que desfila en la fiesta de Santa Mar de Ribarteme en As Neves de Pontevedra, donde la gente carga con ataúdes a familiares vivos agradeciendo a la virgen poder cargar el peso de gente viva. Oyendo comparsas cierras los ojos y suenan a lo de siempre, chillan más que cantan e imitan a Aragón o Bienvenido sin disimular.
De las 50 chirigotas que se inscriben en un concurso normal, 40 tienen menos gracia y chispa de Cádiz que la Vijanera en Silo (Molledo, Cantabria), donde extravagantes «zarramacos» van vestidos de pieles y colores vivos con grandes campanas y sombreros puntiagudos.
De los diez cuartetos que concursan en un año normal 7 son para echarle el telón a mitad de presentación porque tienen menos bis cómica que un cuarteto formado por Vicente Sánchez, Blas Fernández, Carlos Díaz y el obispo de Cádiz.
Todo lo que he dicho anteriormente es falso pero, ¿a que fastidia que le digan estas barbaries a tu modalidad ?
Pónganse en el lugar de los coros y sus coristas. Un respeto a ellos durante el concurso, son el origen de nuestras coplas.
No a la invasión.