Manuel Sampalo

Semana Sampa

No fue hasta que pasamos a la ESO, que mi padre nos acercó a Granada a que conociésemos la Semana Santa

Manuel Sampalo

Muchos no me creen cuando les cuento que no vi una procesión de Semana Santa hasta los once años. Viviendo en Andalucía parece algo impensable. Pero así es. Nosotros, mi hermana y yo, pasábamos las vacaciones –verano, Semana Santa y Navidad– en el cortijo familiar ( ... Daimuz Bajo), vecino al de los García Lorca (Daimuz Alto). Y como supondrán, por una cortijada rodeada de olivos y chopos de La Vega de Granada, no pasa ningún cristo ni ninguna virgen. El único paso que veíamos por Pascua era el de las orugas procesionarias que, como una ristra kilométrica de gusanos peludos, se arrastraban entre los pinos. Tenían algo de sagrado, ya que los mayores nos advertían: «¡Niños, no las toquéis!»

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación