Juan Casas Carbajo
El pin parental
En base estrictamente a la ley vigente en España en la actualidad, los hijos sí pertenecen a los padres
El Pin Parental es un recurso que VOX plantea para que los padres puedan vetar determinados contenidos del curriculum escolar y que ha levantado un revuelo en el campo de la educación. Según VOX, la forma de utilizarlo es a través de un ... escrito de los padres solicitando a los directores de los centros educativos que les informen sobre cualquier actividad relacionada con la identidad de género (yo diría sexo porque el género es un concepto gramatical), el feminismo o la diversidad LGTBI (Lesbianas, Gay, Transexual, Bisexualidad, Intersexual), con el fin de que los padres puedan dar o no su consentimiento a estas actividades (charlas, talleres, etc, relacionadas con estos temas).
Hasta aquí el concepto de Pin Parental; veamos ahora si los padres –al decir padres me refiero a los padres y madres, por supuesto– tienen o no derecho a utilizar este recurso, para lo cual voy a centrarme en las leyes, principalmente en la Constitución de 1978, en la legislación educativa vigente y en lo que la ciencia dice de las funciones de la familia, para no identificarme con ninguna tendencia política.
Comencemos por la Constitución. Los artículos que tratan sobre la Educación son: El artículo 27 y el artículo 39. El artículo 27.3, dice: «Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones».
El artículo 39.3, dice: «Los padres deben prestar asistencia de todo orden a los hijos habidos dentro o fuera del matrimonio, durante su minoría de edad y en los demás casos en que legalmente proceda». Luego los padres sí pueden oponerse a que sus hijos reciban determinadas enseñanzas diferentes a las que propone el currículo oficial obligatorio.
Seguimos con la Ley de Educación vigente. Los Reales Decretos: 126/2014, de 28 de febrero y 1105/2014, de 26 de diciembre, establecen , respectivamente, los curricula de Educación Primaria, Secundaria Obligatoria y Bachillerato que se pueden consultar en la página web del Ministerio de Educación.
Como puede observar fácilmente –quien haga el ejercicio de consultarla–, a nivel legal, en los curricula citados no se contemplan actividades relacionadas con el colectivo LGTBI, de forma obligatoria lo cual no quiere decir que no las puedan realizar, pero sí que los padres pueden oponerse a que sus hijos asistan a ellas.
Veamos ahora que dice la ciencia sobre las competencias de la familia en lo relativo a la educación de sus hijos.
Que la familia es algo importante lo demuestra el hecho de que son varias las ciencias que a lo largo del tiempo se han ocupado y se siguen ocupando de ella: la Antropología, que estudia, entre otras cosas, las diversas formas en las que se ha presentado a lo largo de la Historia y de las que en la actualidad se manifiesta. La Sociología que se ocupa de sus funciones; la Pedagogía, que estudia la influencia y la responsabilidad que tiene en la educación de los hijos y la Psicología que se preocupa de las repercusiones que pueda tener en lo relativo al desarrollo y formación de la personalidad de los niños y jóvenes. Si todas estas ciencias se ocupan del estudio de la familia, debe ser que ésta no es algo baladí de lo que se pueda prescindir con facilidad. Veamos ahora, brevemente, que es lo, que cada una de estas disciplinas nos dicen sobre la institución familiar.
Para la Antropología, la familia es una unidad social en la que el hombre pasa una gran parte de su vida; y esto ocurre, tanto en las sociedades primitivas como en las civilizadas. Esta unidad social se encarga de su cuidado desde el nacimiento: lo alimenta, lo protege de cualquier peligro, lo atiende cuando está enfermo e incluso lo acompaña en la muerte, guarda luto por él y se preocupa de que tenga unos ritos fúnebres adecuados. En la actualidad, este cuidado comienza incluso antes del nacimiento.
La Antropología nos habla también de las distintas clases de familia, que no las expongo aquí por no alargar el artículo, pero que el lector interesado lo puede ver en mi libro: Vivimos y soñamos pero no morimos. La sociología, de acuerdo con Musgrave le asigna las siguientes funcione: Funciones sexuales, Función de socialización y Función económica
La pedagogía, considera que la familia tiene una gran influencia en la educación de los hijos. Además de la socialización, ésta favorece o no la acción de la escuela, entendiendo por ésta cualquier centro educativo del nivel que sea, aunque muchas de las funciones citadas han salido prácticamente del ámbito familiar, tales como las de economía, procreación, cuidado de los miembros enfermos o ancianos, puesto que existen en nuestra sociedad instituciones como hospitales, asilos, tribunales de justicia o empresas que se encargan de satisfacerlas, existen otras que difícilmente saldrán de su ámbito.
El Profesor Quintana Cabanas, llama a las primeras funciones alienables de la familia y a las otras, funciones inalienables. Veamos cuáles son éstas últimas:
En primer lugar, dice el citado profesor está la de servir de refugio y descanso después de una agotadora jornada laboral o cuando se está sufriendo una situación estresante. Es muy difícil encontrar fuera de la familia otra institución que la sustituya en estas circunstancias.
Otra función inalienable de la familia es la educadora, tal como hemos señalado más arriba. En estos momentos estamos asistiendo en España a una defensa de esta función por parte de los padres. Me refiero a las objeciones de conciencia que muchas familias están presentando ante la polémica suscitada por el motivo de este artículo, como lo fue hace unos años con la asignatura de Educación para la Ciudadanía que el gobierno quería que se impartiera en los centros educativos.
Por último la Psicología insiste en la influencia de la familia en la formación de la personalidad de los hijos, así como en la socialización. Uno de los primeros que destacaron la importancia de la familia en el desarrollo de la personalidad fue Freud que destacó su valor en los primeros años de la vida del niño. Por otra parte la socialización primaria constituye para la Psicología un proceso mediante el cual el niño interrelaciona los modelos sociales que su familia le presenta con la interiorización y asimilación que éste hace de dichos modelos.
Todo esto nos demuestra que la familia es una institución muy importante en la vida de los humanos por lo que hay que protegerla y ayudarla para que pueda realizar sus importantes funciones, de tal forma que repercutan en el bien de la sociedad.
Por todo lo dicho anteriormente la familia sí tiene derecho a vetar cualquier contenido que se salga de lo estrictamente académico y desmiente lo que hace unos días he escuchado en una emisora de radio por boca de una ministra que: «Los hijos no son de los padres». Sí que los son de acuerdo con las funciones inalienables citadas. Y si no son de los padres ¿de quien son, señora Ministra, del Estado como en Esparta?