El apunte
Hechos y no anuncios
La Junta invita, otra vez, a creer en la Ciudad de la Justicia pero los gaditanos ya perdieron la fe
Ahora toca creer . Pero esta ciudad tiene las reservas de fe bajo mínimos. De hecho. Le cuesta confiar en lo que no ve porque no ha visto ningún proyecto concluido, más que un puente y un soterramiento, en los últimos 30 años. Con todo, ahora nos dicen que ya, que hay que creer. Además, hay que confiar en el proyecto de la Ciudad de la Justicia de Cádiz, uno de los mayores despropósitos de cuantos planes ha presentado la Junta de Andalucía en los últimos años. Ya es decir, porque está un tranvía que nunca llegó, una enorme residencia turística cerrada desde la década anterior y camino de la próxima o un nuevo hospital que se presentó en los terrenos de la antigua factoría aeronáutica, aquel que se iba a construir con las plusvalías de unos pisos que nunca se construyeron.
Pero dicen que toca creer. Otra vez. En la Ciudad de la Justicia. El proyecto presentado hace una década por el gobierno andaluz pretendía unificar todos los juzgados de la capital, que actualmente se encuentran dispersos entre la Audiencia Provincial –en la Cuesta de las Calesas–, los de San José y los del estadio Carranza. El solar elegido inicialmente para ello era el ubicado entre las calles Brunete y Tolosa Latour, que lleva años abandonado. Aquello debía servir para dinamizar esa zona de San Severiano junto al nuevo pabellón Portillo, otro de los grandes despropósitos urbanísticos de la ciudad, esta vez por parte del Ayuntamiento –del Partido Popular primero y de Podemos en la actualidad–. Ni la Ciudad de la Justicia ni el Pabellón Portillo van a convertirse en realidad a medio plazo y los vecinos de la zona conviven cada día con dos enormes solares abandonados que simbolizan a la perfección la realidad de Cádiz hoy día.
Ahora, la consejera de Justicia e Interior –Rosa Aguilar, que también presentara en loor de vecinos el proyecto de tranvía que cruzaba Cádiz– dice que ya es una realidad, que las obras se verán en un año y que ya es una realidad la reactivación de la Ciudad de la Justicia en los antiguos almacenes de Tabacalera, junto al barrio de Loreto. Bien está que se lo anote en su agenda como una de sus prioridades, aunque los gaditanos saben por experiencia que de poco servirá. Mucho tienen que cambiar las cosas para que se despeje el horizonte de desesperanza y desconfianza en una población que quiere ver hechos porque está muy cansada de anuncios. Políticos o publicitarios. Lo mismo le da.
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