LA VOZ DE CÁDIZ - EL APUNTE
El eterno despropósito de la Ciudad de la Justicia
De poco servirá que el delegado de la Junta se anote el proyecto como una de sus prioridades si no hay voluntad de diálogo de todas las partes
Por más hojas que pasemos en el calendario, hay cosas que no cambian. El proyecto de la Ciudad de la Justicia de Cádiz es uno de los mayores despropósitos de cuantos planes ha presentado la Junta de Andalucía en los últimos años. Empatado, eso sí, con el del nuevo hospital que se presentó en los terrenos de la antigua factoría aeronáutica, aquel que se iba a construir con las plusvalías de los pisos proyectados en la Avenida, donde se encuentra el actual Puerta del Mar.
El proyecto presentado hace años por el gobierno andaluz pretendía unificar todos los juzgados de la capital, que actualmente se encuentran dispersos entre la Audiencia Provincial –en la Cuesta de las Calesas–, los de San José y los del estadio Carranza. El solar elegido para ello era el ubicado entre las calles Brunete y Tolosa Latour, que lleva años abandonado. Aquello debía servir para dinamizar esa zona de San Severiano junto al nuevo pabellón Portillo, otro de los grandes despropósitos urbanísticos de la ciudad, esta vez por parte del Ayuntamiento –del Partido Popular primero y de Podemos en la actualidad–. Ni la Ciudad de la Justicia ni el Pabellón Portillo van a convertirse en realidad a medio plazo y los vecinos de la zona conviven cada día con dos enormes solares abandonados que simbolizan a la perfección la realidad de Cádiz hoy día.
Ahora, el delegado de la Junta en Cádiz, Fernando López Gil, asegura tomarse como un «reto personal» la reactivación de la Ciudad de la Justicia. Bien está que se lo anote en su agenda como una de sus prioridades, aunque los gaditanos saben por experiencia que de poco servirá. Por lo pronto porque para ello debe ponerse de acuerdo con el Ayuntamiento, dirigido por Podemos, o con la Zona Franca, en manos del Partido Popular. Por tanto, mucho tienen que cambiar las cosas para que se despeje el horizonte en un asunto que en absoluto es baladí. Ya el alcalde ha vuelto a mostrar sus pocas ganas de llegar a entendimientos con el PSOE, por más que de puertas para afuera trate de ‘venderse’ como el líder de un equipo de Gobierno dialogante. Repetir frases como «la Junta tiene un discurso falso y manido» o «mantiene a la ciudad como rehén de sus políticas» no es la mejor manera de avanzar.