El cuento de las cuentas municipales

Algo no encaja en las cuentas del Ayuntamiento de Cádiz. Los números no cuadran y la confusión empieza a ser el denominador común de la gestión económica de la hacienda local. La cifra exacta sobre la deuda a largo plaza baila en función de la persona que la presenta. Partíamos de 275 millones de euros de débito, pero ignoramos si se ha reducido en 10 millones, como defiende el concejal de Hacienda, o en solo uno, como plantea la oposición. Tampoco sabemos con exactitud a qué se destinarán los casi ocho millones de euros que ingresará el Consistorio con la venta de los bajos de la tribuna del Carranza.

El alcalde de la ciudad, José María González, se ha visto obligado ahora a pisar el acelerador para elaborar unos presupuestos antes de marzo. No hay que olvidar que su equipo de Gobierno ha estrenado el año con las cuentas prorrogadas de 2014, es decir, han gobernado desde que llegaron el pasado junio a San Juan de Dios con un presupuesto elaborado por el PP el año anterior. Es obvio que estas cuentas ya han quedado obsoletas y se necesita un nuevo informe de ingresos y gastos que avale la solvencia del Consistorio. El alcalde se ha negado hasta el momento a redactar un nuevo presupuesto con el pretexto de que aguarda el resultado de una auditoría.Este informe debe revelar el verdadero estado de las arcas municipales y actuar así en consecuencia. Pero el tiempo apremia y los bancos no se fían de las palabras. Quieren hechos. La redacción de un nuevo presupuesto para un gobierno en minoría no es tarea fácil y es más que probable que el alcalde tenga que retrasar sus pronósticos.