OPINIÓN
Contrastes en Navantia
Las dificultades en Puerto Real se oponen a la buena situación en Cádiz y San Fernando
Durante la década que ya encamina sus últimos meses, el astillero de Cádiz se ha convertido en un referente internacional en el mercado de la reparación de cruceros. No ha sido fácil llegar hasta ese momento. Navantia inició de manera muy tímida este ... trabajo en septiembre de 2009 y poco a poco se colocaba entre los primeros , compitiendo con sus más duros rivales: Italia, Francia y los países nórdicos.
Los astilleros españoles se embarcaron en esta tarea por obligación y necesidad. No quedaba otro camino. Un año antes, la Armada Española había anunciado la imposibilidad de seguir con las inversiones para la renovación de su flota. Los recortes presupuestarios y los ajustes pusieron a la Armada Española en la dura tesitura de sacrificar sus proyectos a la espera de tiempos mejores. Navantia fue la principal afectada por esta decisión, que perdía así a su principal cliente. Ante esta situación, los astilleros públicos tuvieron que reinventarse y explorar nuevos mercados. De esta forma, surgió la necesidad de abarcar la reparación de cruceros como un objetivo prioritario. La compañía Iberocruceros fue la primera que tendió la mano y confió en Navantia para reformar uno de sus barcos.
El primer trabajo que se realizó en el astillero gaditano fue una reparación para Iberocruceros, que siguió apostando por la empresa naval española y delegó en ella reformas notables como las del ‘Grand Mistral’ y el ‘Grand Celebration’. El astillero de Cádiz obtuvo la primera recompensa en 2011 cuando Royal Caribbean decidió confiarle la reparación del ‘Splendeur of the Seas’ . Desde entonces Navantia ha ido sembrando éxitos hasta recoger ahora una importante cosecha de oportunidades. El astillero de Cádiz ha batido en los últimos tres años, de forma consecutiva, su récord en materia de reparaciones de cruceros. La planta de la capital gaditana ha solventado los últimos cursos con la carga asegurada desde la primavear hasta final de año.
Al otro de la Bahía, en cambio, la experiencia con el sector de cruceros no parece tan fructífera. Navantia se ha quedado a un paso de participar en la construcción de un crucero francés. La plantilla afirma que se está quedando sin faena y es preciso engrosar su cartera de pedidos. Con todo, conviene evitar el pesimismo generalizado y la precipitación en las protestas. Sobre todo, conviene no olvidar que San Fernando y Cádiz tienen sus carteras completas.