Una recuperación necesaria
La mejora de las perspectivas turísticas de agosto supone un alivio insuficiente pero capital para la economía de toda la provincia
El año 2021 era el de la esperanza económica y sanitaria pero la evolución de la pandemia que nos asola ha demostrado que aún habrá que esperar. Con suerte, será la segunda mitad del año la que muestre robustos signos de recuperación. Los primeros meses ... estivales no han sido halagüeños para una economía tan débil como la gaditana. Especialmente, para su esencial sector turístico no eran tranquilizadores. Las cifras de ocupación previstas para agosto, impulsadas por la excelente campaña de vacunación de la Junta y el prestigio turístico de la provincia a escala nacional, parecen capaces de compensar aún las cifras. Con vaticinios de hasta un 90% en determinadas áreas -pisos turísticos, chalés y apartamentos, e incluso grandes hoteles- todo puede dar un cambio a mejor.
Este previsible giro, con la preocupación de un otoño duro por falta de movilidad internacional, es un alivio de grandes proporciones para toda la provincia. No hablamos sólo de turismo, de hoteles, alquileres y hostelería. Está en juego la primera potencia económica gaditana. Especialmente en la capital, donde los pocos ‘turismófobos’ iluminados han encontrado con frecuencia el respaldo del Ayuntamiento, por acción u omisión, queda claro que cuestionar la importancia del turista es absurdo. El peso del sector servicios, con todos los consumos asociados que arrastra, ha quedado al descubierto de forma descarnada, incluso dramática, durante estos 17 meses de pandemia. Nada se valora tanto como cuando se pierde. Siquiera por falta de alternativas, por la decadencia sostenida del sector industrial, durante décadas, y por la falta de apoyo al primario –que ha reivindicado su prestigio en esta alerta sanitaria–, cuando respira el turismo respiramos todos. Puede ser triste o insuficiente pero es una realidad absoluta. Podrá ser un sector que crea un empleo que debe ser mejor pagado, que tiene el lastre de ser estacional pero es el medio de vida que sostiene a más familias en la provincia. Conviene tener presente la verdad para evitar confusiones. De hecho, el siguiente reto colectivo es mejorar las previsiones en otoño para poder llegar a la campaña de diciembre y enero con algo de aire.