La realidad desnuda la demagogia
El equipo de Gobierno rechaza usar los beneficios de Eléctrica de Cádiz para mitigar la subida de precios pese a sus proclamas de atender a los gaditanos que peor lo pasan con la crisis
La demagogia tiene las patas muy cortas. Los populismos que llevan tantos años copando el espacio político pueden utilizar frases grandilocuentes y buscar soluciones imposibles para los problemas. Pueden, incluso, señalar falsos culpables de situaciones sobrevenidas y fomentar la lapidación de algún responsable político –presente ... o pasado– de la manera más injusta que se pueda imaginar. Pero el tiempo termina poniendo a cada uno en su sitio y pasados los años, todos terminan viendo que ciertos líderes que se creían emperadores han estado desnudos desde el primer momento.
Esta situación, que en algunos lugares sería excepcional, es la norma en el Ayuntamiento de Cádiz. O, para ser justos, en el equipo de Gobierno. Los mismos que proclamaban que los beneficios de las empresas municipales debían ir directamente a ayudar a los gaditanos a pagar sus recibos han dado marcha atrás cuando la realidad les ha pasado por encima. El último ejemplo lo hemos en lo que ha sucedido con Eléctrica de Cádiz. El alcalde rechazó en el Pleno que se usaran los beneficios –o las plusvalías, si prefiere un lenguaje pulcramente marxista– en mitigar la subida de los precios de la energía. La escalada sin precedentes de los precios de la luz que no ha sabido contener el Gobierno de Sánchez ahora se repercutirá con toda su crudeza en el consumidor de Cádiz.
Kichi, si por algo se ha distinguido en los años que lleva en el Gobierno de San Juan de Dios, es por haber manejado como nadie las palabras y los tiempos. Sin embargo, a nadie ha podido convencer con su eufemismo de «indexar los precios», con el que quiere evitar el término «incremento». Como siempre, mientras se le da al pico no se le da a la pala y el equipo municipal, con su desidia acostumbrada, no ha sido capaz de aprobar el bono social ni de acogerse al bono estatal, del que se benefician 18 mil familias de la provincia pero, como denuncia el Partido Popular, ninguna que sea cliente de Eléctrica de Cádiz.
La demagogia, a la hora de gestionar, no puede ser eterna. El equipo de Gobierno ha preferido salvar las cuentas de Eléctrica de Cádiz que las de las familias de los gaditanos, algo que habrá que tener en cuenta cuando vuelva a llenársele la boca, o el megáfono, con su histriónica defensa del ciudadano.