EL APUNTE
Prudencia y prevención, la mejor de las vacunas
A pesar de que ya no es obligatorio llevar mascarillas en exterior con distancias de seguridad, los contagios siguen dándose por lo que la responsabilidad social continúa siendo clave en la lucha contra la Covid
«Mascarilla, distancia y aire libre, son las tres patas de la prevención», cuenta el doctor Bascuñana, director de los hospitales de El Puerto y Sanlúcar. Lo sostiene de manera rotunda en una entrevista que publica hoy este periódico. Sin duda alguna. La prudencia, insiste, ... sigue siendo la mejor vacuna contra la Covid. Hace unos meses, pero también ahora. A pesar de que los niveles de afección han bajado y también el número de hospitalizados o fallecidos por coronavirus, la realidad (es decir los datos) siguen demostrando que el virus continúa vivo y que si no se tiene cuidado se puede contraer la enfermedad. Más cifras. En las últimas 24 horas en la provincia de Cádiz ha habido un total de 146 nuevos casos positivos, 51 personas están ingresadas y ocho de ellas en la UCI. Por tanto, es claro que el coronavirus no se ha marchado.
Ayer, primer día permitido sin mascarillas en espacios públicos ya se podía ver a muchos gaditanos y visitantes con la cara descubierta. En la playa, terrazas, de paseo... Está permitido, sí, pero también se debe de hacer con cuidado. De nuevo se aboga a la responsabilidad social porque el daño provocado a uno mismo puede ser también el que se genere a otros. Como dice el doctor Bascuñana la decisión de eliminar la obligación del uso de las mascarillas puede ser acertada pero siempre con prudencia. No es lo mismo en unas zonas que en otras. Y siempre teniendo claro dónde te puedes despojar de ella y dónde no. El coronavirus, como todos los virus, explica, tiende a sobrevivir además de a reproducirse por lo que sus mutaciones son frecuentes e inesperadas. Estos cambios además son más resistentes a los efectos de la vacunación. En Cádiz se está a punto de llegar al medio millar de personas inoculadas pero todavía queda mucha gente que no ha recibido ni una dosis. Entre ellos, los más jóvenes, quienes, precisamente, son los que más contagios acumulan en las últimas semanas debido a las reuniones y al ocio. Por ello no deben de olvidar que estamos en pandemia. No se ha acabado. El alivio en las restricciones es un paso más hacia la normalidad pero eso no significa que ya se haya llegado al final del camino. Por tanto es necesario hacer un nuevo llamamiento a la conciencia de grupo y pensar que tu daño es también el de otros por lo que toca seguir pensando aún cómo se debe de actuar.