Un problema que se multiplica
La falta de acuerdo entre Ayuntamiento de Cádiz y Policía Local ha dejado la ciudad desprovista de servicios
En ocasiones muchos problemas nacen derivados de un sólo. Si por un clavo se pierde una herradura, por ésta un caballo y así, en una gradación ya conocida, se termina perdiendo un reino, la ciudad de Cádiz está perdiendo demasiadas cosas por la falta de ... capacidad de diálogo de su Ayuntamiento. El enquistamiento de la negociación con la Policía Local ha dejado a la ciudad sin numerosos servicios y, como un barco que se hunde, ya se ven varias vías de agua en la convivencia normal de la ciudad por la raquítica capacidad gestora de la coalición en el poder.
Fuentes cercanas al Ayuntamiento y a la Policía Local indican que los encuentros que se han mantenido no han dado ningún fruto. Pese a que es ahora cuando la ciudad precisa de toda la fuerza policial para garantizar la seguridad de gaditanos y visitantes, máxime cuando las medidas de control por la pandemia nos hacen ser más exigentes, hasta finales de agosto no habrá una nueva reunión para encontrar soluciones. El equipo de Gobierno puede que sí, pero los problemas de Cádiz no se van de vacaciones en agosto.
La última de las quejas por esta situación ha venido por parte de los comerciantes del centro. La inacción de la Policía Local ha provocado la proliferación de vendedores ilegales que no sólo realizan una actividad que compromete a los comerciantes que sí cumplen con la normativa y están al día de sus pagos, sino que en muchos casos impide el paso en calles tan concurridas como Compañía o Columela. Cuando más falta hace que se respeten las distancias, más se echa en falta esta medida de control.
Como se ha echado en falta, y se seguirá echando, en el control de las playas en el que está siendo el verano más complicado de las últimas décadas. Kichi ha conseguido, merced a tensar la cuerda con los agentes locales, que la playa esté sin agentes patrullando, una imagen que sólo recuerdan los mayores del lugar y que deja a los pies de los caballos a los vigilantes de la Junta.
La ciudad no puede estar esperando un mes más a que se produzca una negociación que tampoco asegura un acuerdo. El debate debe iniciarse ya para buscar puntos de acuerdo que desbloqueen una parálisis que tiene como rehenes a los ciudadanos de Cádiz.