El peligro está a un solo clic
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado no dejan de alertar de los riesgos para los jóvenes en internet. La educación y la prevención, los ‘antídotos’
Dar la espalda a internet por miedo o porque se pueda caer en estafas, amenazas o engaños no es la salida. Ya es casi un mantra decir que las nuevas tecnologías no solo han cambiado el modo en el que nos comunicamos o relacionamos sino ... que lo han revolucionado todo. En el trabajo o en los estudios son fundamentales pero también en el comercio o también para los jóvenes que tienen en sus móviles la principal herramienta para relacionarse entre ellos. Por eso y porque todo se ve y se consume por internet es clave tener ciertas premisas en su uso para no ser víctima de cualquiera que lo utiliza pero para sacarle partido de otra manera:haciendo el mal. Delinquiendo.
La Policía Nacional y la Guardia Civil hace años que crearon incluso unidades especiales de agentes que se dedican a ‘cazar’ a los ciberdelincuentes que tienen en internet una ventana magnífica para poder preservar su anonimato cometiendo estafas o abusos y seguir sumando víctimas, siendo además muy complicado poderlos identificar.
Los datos hablan por sí solos como hoy se publica en este periódico. Más de cinco mil gaditanos fueron víctimas de ciberdelitos el pasado año. La mayoría de edades superiores a los 40, aunque se alerta que cada vez son más los menores que son presa de acosos y todo tipo de abusos. «Ahora la gente está más segura en sus casas que navegando desde su ordenador o usando su teléfono móvil», alerta una policía desde la Comisaría Provincial de Cádiz. Y es que el ladrón de toda la vida se ha reinventado y ahora hacen ‘negocio’ por las redes sociales, ‘hábitat’ casi natural ya de los adolescentes.
De ahí que no se cansen de repetir que la educación y la prevención son las mejores armas para combatir estos peligros. Riesgos que pueden incluso dañar la integridad moral y sexual de los chicos o convertirlos en víctimas de un ‘bullyng’ que les persigue allá donde vayan y las 24 horas del día. El riesgo es máximo y los efectos pueden ser incluso mortales como también se ha demostrado. Sin embargo, internet no se va a ir, no va a apagarse porque ya es un modo de comunicación per se, y además es necesario y muy bueno bien utilizado, así que toca prevenir antes de curar y hacer caso a los que saben que por algo avisan.