Un año para olvidar y para no olvidarnos
La crisis del coronavirus ha dejado a las claras la importancia de un gobierno eficaz y de unos ciudadanos que asuman su responsabilidad
Ya habrá oído usted tantos tópicos que no queremos caer en más. Lo cierto es que al volver la vista atrás en lo que ha sido 2020 es insoslayable, como lo será cuando se haga el repaso de la década, hablar del coronavirus. Y se ... puede hacer desde mil variantes, que van desde los aspectos científicos a las repercusiones económicas pasando por los desafíos medioambientales. Pero como periódico que ha estado dándole información durante 363 días (366 en su versión web), quizá donde más nos interese detenernos en sus consecuencias sociológicas, en cómo nos ha hecho sufrir y crecer como ciudadanos este 2020 que se despide esta noche.
Nada nos hacía sospechar el 1 de enero, cuando Cádiz se despedía para siempre de un peaje que ha lastrado durante medio siglo la provincia, los acontecimientos que se iban a desencadenar semanas después. De hecho, ese mes se pudo disfrutar de una Cabalgata de Reyes que pocos olvidarán por la preeminencia de su Rey Melchor y del inicio de un Concurso de Carnaval que, con Manolo y Juan Carlos en la memoria, se desarrolló sin más incidentes que los acostumbrados cajonazos. Tanto respetó el virus al dios Momo que esperó a que terminara el Carnaval Chiquito para decir «aquí estoy yo» e irrumpir con la tormenta que todos conocemos de confinamiento, restricciones, acopios en los supermercados y nerviosismo. Y enfermedad y muerte, pero también solidaridad.
Es, sin duda, un año para olvidar. Pero también para recordar. Para recordar a los sanitarios de los distritos de la provincia que pusieron su vida en peligro para salvar la de todos, multiplicando las horas y los esfuerzos para afrontar una situación para la que nadie estaba preparado. También para recordar al resto de profesionales como militares, repartidores o cajeros que siguieron dando el callo durante estos meses. Y también, justo es decirlo, para no olvidar a los que estuvieron sembrando cizaña en esta dura etapa y a quienes por sus acciones u omisiones hicieron que los ciudadanos tuviéramos un poco más difícil salir de esta situación o hacerlo en buenas condiciones.
Y una vez más, amigo lector, le pedimos que en la celebración de esta noche sea responsable, que se cuide y que cuide a los que le rodean. Nuestro deseo de año nuevo es que en el último Apunte de 2021 volvamos a encontrarnos. Feliz año.