Molinos en el mar de Cádiz
La energía eólica-marina vuelve a sonar con fuerza en el Estrecho tras la posible modificación del decreto de 2007
Resulta paradójico que una zona como la de Cádiz no tenga parques eólicos en su costa . España llega tarde a esta carrera de las renovables, liderada por Dinamarca, Alemania, Reino Unido y, ultimamente, por Francia. Nuestro país tuvo la oportunidad de entrar por ... la puerta grande en este sector en 2003, sin embargo, las reticencia, las trabas y un decreto de 2007, excesivamente restrictivo, dieron al traste con las iniciativas empresariales que salieron, sobre todo, en la costa gaditana. El Gobierno socialista de Rodríguez Zapatero fue especialmente sensible ante las protestas vecinales y con los temores planteados por los pescadores a la hora de dibujar el mapa eólio-marino de la costa española. Esta situación, desde luego, fue aprovechada por otros países, caso de Alemania y Reino Unido, que no tardaron en plantar molinos en el Mar del Norte y en el Mar Báltico. Pero lo más curioso de esta sitiuación es que los principales proveedores de estos parques, incluso sus promotores, son empresas españolas. Por ejemplo, la eléctrica Iberdrola es la que ha desarrollado los dos grandes complejos eólicos en el norte de Europa: Wikinger (Alemania) y East Anglia One (Reino Unido) y ahora sigue en Francia con el complejo de Saint Brieuc. Lo más sorpredente es que los astilleros españoles, Navantia, son los que están fabricando buena parte de la infrestructura de esos complejos. No hay que olvidar que del astillero de Puerto Real han salido las dos subestaciones eléctricas para Wikinger y East Anglia One, mientras que del astillero gallego de Fene han salido las ‘jackets’ o plataformas para estos molinos.
Es obvio que una legislación tan restrictiva como la que impera desde 2007 en España ha impedido desarrollar un negocio para el que estamos sobradamente preparados y, además, hay suficiente espacio para llevarlo a cabo. Este miércoles, la experta en renovables Alexandra de Marichalar, ha dado una conferencia telemática bajo el patrociono de Cádiz-Port para alertar del negocio que se le viene encima a la Bahía en 2021 con el más que probable cambio normativo del decreto de 2007 para adaptarlo a las nuevas necesidades. Los estudios destacan que los puertos son plataformas vitales para desarrollar el montaje de los campos eólico-marinos, es decir, el espacio portuario más próximo al futuro complejo eólico-marino, es el lugar de ensayo y pruebas del parque, lo que significa la necesidad de una adaptación previa de las instalaciones para poder generar empleo.