El Apunte
Medidas para frenar la escalada sin fin
Los datos de contagios de ayer ponen a las claras que es necesaria una estrategia más dura para evitar más contagios
Las estadísticas de contagios dan ya escalofríos. Mientras en el resto del país parece que la epidemia de coronavirus está controlada , en Cádiz los datos de nuevos afectados no hacen sino subir. Los números de ayer fueron tan duros que hubo compañeros del periódico ... que comprobaron por varias fuentes que no se trataba de un error. Cerca de 800 gaditanos pasaron a engrosar la estadística de infectados por coronavirus , lo que sitúa a la provincia de Cádiz como la que presenta un mayor incremento de contagios de Andalucía . De estar rondando el centenar de casos hace tres semanas, se pasó a estar entorno a los 300. Ayer, los 789 positivos fueron un jarro de agua fría a las teorías de que lo peor de la epidemia había pasado.
La pregunta lógica que surge en este contexto es por qué Cádiz ha pasado de ser una zona en la que los contagios estaban controlados y la incidencia era de las menores de Andalucía a presentar unos datos tan altos, que la han llevado varios días a encabezar las cifras de nuevos enfermos en la región. Algo se estará haciendo mal en la provincia para que se haya descontrolado la pandemia. No valen razones como la afluencia turística, ya que Málaga ha conseguido que sus cifras de infectados estén más controladas, ni el clima, muy parecido a provincias como Huelva, con una incidencia muchísimo menor.
No cabe pues más remedio, en esta tesitura, que pedirle a la ciudadanía que redoble las medidas de precaución. No es concebible que, en estos momentos, Madrid presente una situación mucho más halagüeña que Cádiz cuando hace apenas un mes la diferencia entre ambos territorios era abismal. Es imprescindible respetar las distancias sociales y, especialmente en el ámbito familiar, observar los principios básicos de prevención. El uso de mascarillas, el lavado de manos y la ventilación de espacios cerrados son actos que tenemos que asumir ya como parte de nuestra rutina si no queremos que la curva siga manteniendo su ritmo ascendente. La promesa de una pronta vacuna no nos puede distraer de la principal estrategia actual contra el coronavirus: evitar contagiar y evitar contagiarse. Ya hemos sufrido mucho, no podemos soportar más meses con estas dosis de contagios, de dolor, de muerte