Un año que empieza de la peor manera
Los datos del coronavirus son mucho peores que en 2020: en sólo un mes se han registrado dos de cada tres contagios del virus
En los últimos días del 2020 se repetía en redes sociales, en las conversaciones informales e incluso en los medios de comunicación la máxima de que el 2021 sólo podía ser mejor. Todos teníamos en mente lo que habíamos pasado desde el mes de marzo ... y la perspectiva de cambiar de año nos llenaba de esperanza. Sin embargo, la realidad nos ha golpeado con una gran dureza y los números están mostrando sin piedad lo que supone relajarse contra una pandemia que parece que va a quedarse más tiempo del que pensábamos.
Las cifras están en una competición macabra. En este mes de enero se han contagiado de Covid-19 más de 23.000 gaditanos . Esto es, en tan sólo 30 días (sin contar con los datos que ofrezca hoy la Consejería de Salud, correspondientes a los datos de ayer) habían contraído la enfermedad dos de cada tres personas que han resultado afectadas por esta pandemia. Para ser precisos, si 32.010 gaditanos se habían enfermado desde que se empezaron a registrar los datos, 24.415 la han pillado en un 2021 en el que pensábamos que todo se iba a quedar en un mal sueño. La cifra de fallecidos también da una idea del alcance de esta tercera ola, ya que si 561 gaditanos habían muerto entre marzo y diciembre, sólo en enero han perdido la vida 289 enfermos. El horror.
Los datos dan una idea tan sobrecogedora como realista de la situación, por mucho que el ministro saliente y el epidemiólogo perenne dijeran que la situación parecía controlada y proclamaran motivos para la esperanza. Los esfuerzos por salvar la Navidad han dado como resultado un aumento de contagios que no se recordaba desde los peores días del mes de abril, cuando apenas teníamos información sobre cómo combatir al virus. Ahora que sabemos casi todo de él, es cuando más estamos suspendiendo el examen continuo de luchar contra sus efectos.
Pensábamos que 2021 iba a llegar como una salvación, como un bálsamo a las duras cifras del pasado año y los partes diarios de infectados de la provincia (así como de Andalucía y del resto de España) nos recuerdan que las cosas no cambian solas, que somos nosotros los capitanes de la realidad y que para doblegar la curva hace falta concienciación y esfuerzo. La vacuna está aquí y ha venido para ayudarnos pero de poco nos servirá si somos incapaces de hacer un último esfuerzo en esta recta final. Si no, siempre podemos confiarlo todo a 2022.